Los legisladores, incluidos miembros de la cúpula republicana, han exigido que el gobierno de Trump les proporcione más información sobre los ataques de las fuerzas armadas estadounidenses contra botes en el Caribe y el océano Pacífico oriental a los que acusa de transportar drogas.
Pero la votación del jueves, que en esencia impediría un ataque en territorio venezolano sin obtener primero la autorización del Congreso, mostró hasta dónde están dispuestos a llegar los senadores republicanos para permitir que el gobierno de Trump siga acumulando fuerzas navales en la región.
"El presidente Trump ha tomado medidas decisivas para proteger a miles de estadounidenses de narcóticos letales", dijo el senador republicano Jim Risch, presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado.
La iniciativa prácticamente no tenía posibilidad alguna de ser promulgada, en parte porque necesitaría de la firma del propio Trump, pero aun así permitió a los demócratas presionar a sus colegas republicanos sobre las amenazas de Trump contra Venezuela. La legislación fue rechazada con una votación de 49 a favor por 51 en contra.
"No deberíamos ir a la guerra sin un voto del Congreso. Las vidas de nuestras tropas están en juego", dijo el senador demócrata Tim Kaine, quien impulsó la legislación, en un discurso en el pleno.