El domingo pasado se produjo un trágico hecho en Ciudad de Gaza, donde decenas de civiles perdieron la vida en medio de una crisis humanitaria y una escalada de violencia.
Según informó el Ministerio de Sanidad palestino, el Ejército israelí abrió fuego contra civiles que esperaban ayuda humanitaria en la rotonda Kuwait, en el norte de la Franja.
El Ministerio, afiliado al grupo islamista Hamás, calificó el incidente como una "horrible masacre" y acusó al Ejército israelí de llevar a cabo un "genocidio sistemático" contra la población hambrienta en Gaza.
En otro hecho ocurrido en Deir al Balah, al menos cinco personas murieron y otras cuatro resultaron heridas cuando un dron del Ejército israelí atacó un camión en el que se transportaban, según el servicio de emergencias Medialuna Roja.
Se han revelado detalles adicionales sobre el hecho, con versiones contradictorias sobre si el camión atacado transportaba ayuda humanitaria. Mientras que las fuentes médicas y el Ministerio de Sanidad palestino afirman que sí, el Ejército israelí lo niega, alegando que el objetivo era un individuo vinculado a Hamás.
El sábado pasado, Israel lanzó un ataque contra un grupo de civiles que aguardaban la llegada de ayuda cerca de la rotonda de Al Nabulsi, en el sur de Ciudad de Gaza. Según informó Wafa, la agencia oficial de noticias palestina, este ataque dejó un muerto y 26 heridos.
Estos trágicos sucesos se suman a la devastadora pérdida de vidas ocurrida el jueves anterior en Ciudad de Gaza. Ese día, al menos 118 gazatíes murieron y otros 760 resultaron heridos mientras se congregaban alrededor de camiones que distribuían ayuda, en medio de disparos del Ejército israelí.
La confusión sobre el número de víctimas persiste, con llamados a una investigación independiente para esclarecer los hechos. La comunidad internacional sigue instando a un cese inmediato de la violencia y una solución pacífica para abordar la crisis humanitaria en Gaza.