El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, reconoció este sábado al término del VIII pleno del Comité Central del Partido Comunista de Cuba la necesidad de garantizar un mejor acceso a la alimentación en medio de la "compleja" situación de la isla caribeña.
Además, también es primer secretario del comité central del PCC, subrayó que la producción de alimentos y el autoabastecimiento son tareas de primer orden en las que debe participar toda la población, según informó la televisión estatal.
La reunión del PCC se llevó a cabo en La Habana a puertas cerradas y sirvió para analizar la situación económica del país, que enfrenta una grave crisis desde hace cuatro años.
Hizo un llamado a "batallar por una economía sana y eficiente que garantice la justicia social y el mayor grado de bienestar posible para la población".
Enfatizó que "el pueblo reclama resultados y a ese pueblo nos debemos", reconociendo la creciente demanda de soluciones por parte de la ciudadanía.
En marzo pasado señaló en una reunión con el Ministerio de la Industria Alimentaria que las familias cubanas gastan más del 70% de sus ingresos en comprar comida.
Según Naciones Unidas, Cuba importa el 80% de lo que consume, y el Gobierno destina más de 2.000 millones de dólares anuales a la importación de productos incluidos en la libreta de abastecimiento.
La crisis económica, exacerbada por la pandemia, el endurecimiento de las sanciones estadounidenses y fallidas políticas internas, ha provocado escasez de alimentos, medicinas, combustible, inflación y una creciente dolarización, provocando un descontento social.