Bali, Indonesia.- Los presidentes de estados unidos y China, Joe Biden, y Xi Jinping, respectivamente, coincidieron este lunes en rechazar el uso de armas nucleares en Ucrania y abordaron las tensiones en torno a Taiwán, además de hablar de Corea del Norte, derechos humanos y comerció, informó la Casa Blanca en un comunicado.
La reunión entre Biden y Xi duró unas tres horas y se produjo en la isla indonesia de Bali un día antes del inicio de la cumbre del G20.
Según explicó la Casa Blanca en un comunicado, Biden dijo a Xi que su política hacia Taiwán no ha variado y que sigue oponiéndose a cualquier "cambio unilateral" en el statu quo.
Además, el mandatario estadounidense trasladó al líder chino sus objeciones sobre las acciones "coercitivas y cada vez más agresivas" de Pekín hacia la isla, que ponen en peligro la "paz y estabilidad" en el estrecho de Taiwán y en toda la región.
Asimismo, Biden expresó su preocupación por la situación de los derechos humanos en China y, en particular, por las acciones de Pekín en la región occidental de Xinjiang, en Hong Kong y en el Tíbet.
Con respecto a la guerra en Ucrania, ambos coincidieron en rechazar el uso de armas nucleares en la guerra en Ucrania, una afirmación que cobra importancia debido a las amenazas nucleares de Rusia, socio estratégico de China.
También hablaron sobre el comportamiento "provocador" de Corea del Norte, que ha escalado sus lanzamientos de misiles en las últimas semanas, y subrayó que todos los miembros de la comunidad internacional tienen "interés" en animar a Pionyang a "actuar de forma responsable", en velada referencia a China.
GUERRAS COMERCIALES
Jinping expuso a Biden de que iniciar una guerra comercial, tecnológica, buscar el desacoplamiento económico o cercenar las cadenas de suministros "no sirven a los intereses de nadie".
En su primer encuentro en persona con Biden desde que ambos lideran sus respectivos países Xi consideró que dichas prácticas van contra los principios de la economía de mercado y socavan las reglas internacionales del comercio.
El gobernante chino consideró que en las circunstancias actuales, su país y EE.UU. comparten más intereses de los que les separan, y que el principal de ellos es el de "prevenir el conflicto y la confrontación y alcanzar una coexistencia pacífica".