Principio de "no intervención" retrocede en comicios de Argentina

Aunque exgobernantes de América Latina y el Caribe y de España avalaron a Milei, el escenario mostró una diferencia

SAN JOSÉ, Costa Rica.- La segunda y definitiva ronda de los comicios presidenciales del próximo domingo en Argentina pareció abrir una práctica sin precedentes políticos y diplomáticos en el hemisferio occidental, con el apoyo de presidentes y expresidentes de España y América Latina y el Caribe a alguno de ambos contendientes, el oficialista Sergio Massa y el opositor Javier Milei, y habría debilitado el principio de no injerencia en los asuntos internos de otros estados.
Los presidentes izquierdistas Andrés Manuel López Obrador, de México; Luiz Inácio Lula da Silva, de Brasil; Gustavo Petro, de Colombia; y Luis Arce, de Bolivia, y el del gobierno de España, Pedro Sánchez, se declararon abiertamente a favor de Massa, en actos diplomáticos que golpearon un aporte americano al derecho internacional: la no injerencia en otros países.
Aunque exgobernantes de América Latina y el Caribe y de España avalaron a Milei, el escenario mostró una diferencia: una situación significa estar en el ejercicio del gobierno y, como Estado, tener responsabilidades diplomáticas, y otra representa haberse deslindado de esos compromisos y opinar de modo individual, por lo que la decisión de un gobernante de colocarse en un bando o en otro rompió el precepto "no intervencionista".
"Es lamentable que se den estas opiniones", advirtió el abogado y diplomático boliviano Jaime Aparicio, exembajador de Bolivia en la Organización de Estados Americanos (OEA).
"Es lamentable que Sánchez y López Obrador intervengan y ofendan a los argentinos, que tienen el derecho de autodeterminarse, elegir a sus candidatos sin ninguna interferencia y mucho menos desde el exterior", dijo Aparicio a EL UNIVERSAL.
"Las declaraciones de presidentes en el ejercicio del poder, como Sánchez, López Obrador, Lula, Petro y otros, pronunciándose claramente a favor de Massa, no solo viola ese principio, sino que corren el riesgo de dañar las relaciones de esos Estados con Argentina si gana Milei", subrayó.
Al plantear que "el principio de no intervención en los asuntos de los Estados es básico del derecho internacional que protege la soberanía de los países y su capacidad para determinar sus propios asuntos sin interferencia externa", recordó el impulso esencial de México para afianzar ese concepto de carácter global.
"América Latina justamente ha promovido este principio y fue México el que impulsó la Doctrina Estrada, llamando a los países a abstenerse de intervenir en los asuntos de otros Estados soberanos", mencionó.
Convertida desde 1930 en base de la política exterior mexicana, la Doctrina se sustentó en los principios de no intervención en los asuntos internos de otros estados y en el derecho a la libre autodeterminación de los pueblos. Como secretario de Relaciones Exteriores de México de 1927 a 1932, el diplomático mexicano Genaro Estrada (1887-1937) la diseñó para definir el accionar internacional de su país.
Aparicio aclaró que "la única excepción a ese principio que ha sido aceptada en el sistema interamericano en base a compromisos y a tratados internacionales y que permite la intervención o la injerencia es en el caso de violaciones a los derechos humanos y de las interrupciones de los procesos democráticos".
"Los apoyos de expresidentes y de otras figuras internacionales importantes son legítimos, porque lo hacen a título personal y no comprometen la fe de sus Estados. Es completamente distinto", recalcó.

"Grosera violación"


Para el diplomático y abogado costarricense Enrique Castillo, excanciller y exembajador de Costa Rica en la OEA, Francia y Reino Unido, "las manifestaciones en favor o en contra de candidatos de otros países en procesos electorales, emitidas por expresidentes o exjefes de Estado o de gobierno extranjeros, son irrelevantes en diplomacia, relaciones exteriores y Derecho Internacional por carecer esas personas de representatividad".
"Por el contrario, las de quienes están en el ejercicio de alguno de esos cargos, lo mismo que los de rango más bajo como ministros de Relaciones Exteriores o embajadores, constituyen una grosera violación de los principios del derecho internacional y de la diplomacia, pues violan la independencia y soberanía del país donde se disputa la justa electoral", declaró Castillo a este diario.
Consultado por este periódico, el politólogo ecuatoriano Sebastián Mantilla, director ejecutivo del (no estatal) Centro Latinoamericano de Estudios Políticos (CELAEP), de Ecuador, aseveró que el involucramiento de presidentes de América y Europa en los comicios de Argentina "es una situación inusual, inaudita, que no se ha dado nunca antes en la región".
"Que presidentes de una misma línea política, a los que les conviene que Massa salga electo presidente, intervengan de manera directa en las elecciones de Argentina es realmente preocupante. Eso responde básicamente a un alineamiento del grupo de estos gobernantes que se denominan de izquierda, de la nueva izquierda o de la izquierda bolivariana", indicó.
"Y están pretendiendo que, en el caso de Argentina, no se incline el péndulo eventualmente hacia la derecha (con Milei). Esté Massa en primer lugar, en segundo o no tenga chance de salir elegido presidente, no deberían darse declaraciones de este tipo", aclaró.
Tras recalcar que "hay un interés de fondo por tener gobiernos alineados en la izquierda que los lleva a tomar este tipo de pronunciamientos", sentenció que "es lamentable porque, de alguna manera, generan una serie de situaciones de malestar interno en los países. Existe desazón frente a estos pronunciamientos".

Las interrogantes


¿Estaría de acuerdo López Obrador con que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, tome partido y apoye a la opositora derechista mexicana Xóchitl Gálvez como candidata presidencial de la coalición Frente Amplio por México para los comicios de 2024?
¿O Sánchez habría aceptado que Biden divulgara un video en las elecciones de julio de 2023 en España en respaldo a su rival, el derechista Alberto Núñez Feijóo, candidato del opositor Partido Popular?
Siendo presidente de Argentina de 2015 a 2019, y en pelea por reelegirse, ¿habría aceptado el derechista Mauricio Macri que López Obrador o Sánchez apoyaran a Fernández en los comicios que perdió en 2019 ante el hoy mandatario?
Aunque repetidamente blandió desde 2018 los conceptos de no intervención y del derecho a la libre autodeterminación de los pueblos como bastiones de la política exterior mexicana, López Obrador tomó partido en las elecciones argentinas al tildar este 13 de noviembre a Milei de "facho ultraconservador".
El 23 de octubre anterior, al día siguiente de que Massa ganó la primera vuelta y Milei quedó de segundo y ninguno sin los porcentajes mínimos para triunfar y evitar la segunda, López Obrador festejó los "buenos resultados" de esa fase. El candidato oficialista logró en esa etapa una sorpresa al aventajar al opositor con una distancia de 6,79% y de un millón 818 mil 502 votos.
"Estoy contento también porque fueron buenos los resultados en Argentina, estoy muy contento", anunció el gobernante mexicano.
Sin mencionar al aspirante argentino, Lula lanzó el 14 de este mes en un video en su cuenta de X (antes Twitter) un evidente apoyo a Massa y luego de que Milei le atacó con dureza al acusarlo de comunista y anticipar que, de triunfar, romperá relaciones diplomáticas con Brasil.
"Pido que los argentinos recuerden que necesitamos un presidente que aprecie la democracia y que valore las relaciones entre nuestros países", aseveró Lula.
En un video que circuló esta semana por redes sociales de internet para opinar sobre los comicios de Argentina, Sánchez afirmó que Massa "representa la apuesta por la convivencia democrática, por la concordia y ofrece un proyecto de unidad, de solidaridad, con oportunidades para todos y para todas".
En una clara alusión indirecta a Milei y a su parafernalia o excesos de propaganda política, pero sin citarlo, Sánchez planteó que "frente a la estridencia, Sergio Massa representa la tolerancia y el diálogo para construir eso, una Argentina con un desarrollo inclusivo que no deje a nadie atrás".
"Por eso, querido Sergio, te envío todo mi apoyo desde España y mis más sinceros deseos de éxito para las próximas elecciones del 19 de noviembre. Suerte y a ganar", proclamó.
Petro, entre tanto, narró el 14 de este mes en X que "en Argentina se decide no solo el futuro de su pueblo sino la esperanza de América".
"Esperanza o barbarie deciden los argentinos", señaló, al acusar que Milei "nos regresa a Pinochet y Videla", en referencia a las dictaduras derechistas de Chile de 1973 a 1990 del general Augusto Pinochet (1915-2006) y de Argentina de 1976 a 1983 en la que participó el general Jorge Videla (1925-2013).
"O un Massa que puede abrir caminos de esperanza. No tengan dudas. Nunca hay que votar por la barbarie y siempre hay que votar por la esperanza", sugirió.
Arce, por su lado, felicitó en X en octubre a Massa por su victoria y escribió que "le deseamos el mayor de los éxitos en la segunda vuelta que definirá que nuestra querida Argentina no vuelva al neoliberalismo y no retroceda en derechos".
El expresidente izquierdista uruguayo José Mujica, gobernante de Uruguay de 2010 a 2015, declaró en un video que se distribuyó esta semana que "si yo fuera argentino, que me siento más que hermano en mi fuero íntimo, ante el dilema que tiene el pueblo argentino, y no porque Massa sea mi amigo, sino que, ante la opción (de Mile8), sé que lo votaría".
Massa "reiteradamente está planteando la necesidad de gobierno nacional", agregó.

Ayuda a Milei


Macri y otros expresidentes de derecha, como los mexicanos Felipe Calderón (2006-2012) y Vicente Fox (2000-2006), los colombianos Andrés Pastrana (1998-2002) e Iván Duque (2018-2022), el boliviano Jorge Quiroga (2001-2002), el chileno Sebastián Piñera (2010-2014 y 2018-2022) y el español Mariano Rajoy (2011-2018), suscribieron una carta en apoyo a Milei.
"Massa representa la continuidad de un modelo económico corporativo fracasado y de instituciones que, en lugar de permitir que Argentina crezca a la par de sus países vecinos, la ha mantenido en un estancamiento permanente desde hace décadas", argumentaron.
"El costo de estas perversas políticas económicas ha sido la inflación galopante, la pobreza extendida y la angustia económica de millones de argentinos que ven como su nivel de vida se derrumba a diario", subrayaron.
En contraste, Milei "es un candidato nuevo en política, con quien, sin dudas tenemos muchas diferencias, pero que cree en las ideas de la libertad y tiene un diagnóstico muy acertado respecto del problema económico del país", alegaron.
Unos 35 millones 912 mil 841 argentinos podrán acudir este domingo a votar entre Milei y Massa en la ronda definitiva de los comicios de Argentina para elegir presidente y vicepresidente. Massa ganó la primera, el 22 de octubre, con 9 millones 853 mil 492 votos (36,78%) y Milei quedó de segundo con 8 millones 34 mil 990 sufragios (22,99%).
Para ganar en octubre se requería del 45% de los votos o, si solo se conseguía pasar el 40%, obtener más de 10 puntos de diferencia sobre el segundo. Como nadie alcanzó esos mínimos y máximos, solo las dos fórmulas—Massa y Milei—que captaron más sufragios pasaron a la segunda etapa y este domingo se triunfará con mayoría simple, sin contar votos blancos ni nulos.
El vencedor asumirá el 10 de diciembre venidero en reemplazo del actual presidente, el izquierdista Alberto Fernández, uno de los más importantes socios de López Obrador en el hemisferio occidental. El traspaso de poderes del mes entrante se hará exactamente a los 40 años del final de la dictadura militar derechista que gobernó de 1976 a 1983 y del inicio del retorno a la democracia, y gobernará por 48 meses.