El presidente de Argentina, Javier Milei, presentó su campaña para dolarizar la economía del país latinoermaciano.
De acuerdo con Milei, el país seguirá con la competencia de monedas, tras recobrar el balance del banco central pagando sus pasivos locales y a través de la reforma del sistema económico de Argentina.
La libre contienda de divisas se refiere a un curso legal entre el peso argentino como el dólar estadounidense, teniendo un tipo de cambio "flexible".
Posteriormente, el banco central ya no imprimiría pesos, dejando que el dólar lo sustituya, convirtiéndose en la moneda dominante de Argentina.
"Los pesos serán una pieza de museo", declaró el controvertido mandatario en un discurso mencionado en un evento de Buenos Aires, agregando que el objetivo final es desaparecer el peso y darle prioridad a los dólares.
Desde que asumió el cargo el pasado mes de diciembre, Milei se ha enfocado en reducir los pasivos del banco para reducir su autoridad monetaria, lo que ha generado la reducción de los tipos de interés hasta el 40%, según estimaciones de la semana pasada.
Aunado a estos movimientos, el ministro Luis Caputo y el resto del equipo de economía de Milei han llevado a cabo medidas para que los bonos ayuden a compensar las obligaciones de la autoridad monetaria.
La competencia entre monedas comenzará una vez que que se liquide la deuda pendiente y se retiren los controles de capital, dando paso a la siguiente etapa del plan económico.