Miedo cambió de bando; al régimen le aterra perder el poder

SAN JOSÉ, CR/EL UNI.- Una nueva realidad política emergió en octubre y noviembre de 2021 en Cuba y recorrió desde sus bordes extremos del cabo de San Antonio, en el occidental, a la punta de Maisí, en el oriental. Sin admitir que en la isla surgió y creció un genuino movimiento opositor y empeñado en reafirmar que sólo existe un único e ideal sistema comunista y revolucionario de absoluto apoyo popular, el régimen cubano reaccionó con una intensa ofensiva policial y política para impedir ayer la marcha en reclamo de democracia y de libertad de pensamiento, organización, prensa y expresión. "El miedo cambió de bando", dijo la periodista cubana Yoani Sánchez, directora del diario digital 14ymedio.com que funciona en la ilegalidad en Cuba, en un audio que envió este lunes vía WhatsApp desde La Habana: "El oficialismo cubano ha desplegado una intensa campaña de amenazas, vigilancia, arrestos y cortes de internet que demuestran sólo una cosa: el terror, el pánico que [las autoridades comunistas cubanas] tienen de perder el poder", agregó. Al denunciar una "extensa ola represiva en la isla" por el 15-N, Sánchez mencionó "el temor" del oficialismo por la "convocatoria masiva" para manifestarse en distintas zonas de Cuba por el respeto a los derechos humanos, la liberación inmediata de presos políticos, el fin de la censura y la "despenalización de la discrepancia". Hay en la isla, aseguró, "un fermento entre los jóvenes de cambio, de deseos de renovación, de basta ya". El disidente cubano Dagoberto Valdés, director de la revista digital Convivencia y exmiembro del Pontificio Consejo Justicia y Paz del Vaticano, consideró que "debemos hacer un alto y tomar conciencia del momento histórico que estamos viviendo en Cuba hoy". En un análisis escrito que envió a este diario, Valdés admitió que "no hemos llegado al final, pero ya podemos ver las luces del amanecer y ya no es más un sueño lo que estamos viendo, haciendo, experimentando, es ya una realidad: Cuba ha despertado como nunca". "Cuba se ha levantado pacíficamente, con una rosa blanca y con la Virgen de la Caridad [Patrona de Cuba], para avanzar en el largo camino hacia la libertad. Es verdad que no hemos llegado aún, pero seríamos muy ingratos, o ciegos y sordos, para no percibir que Cuba ha entrado definitivamente al final de esta etapa y prepara ya la etapa por venir", anticipó. El gobernante Partido Comunista de Cuba prohibió la marcha anunciada originalmente para el 20 de noviembre y reprogramada para este lunes. A diferencia de las respuestas que lanzó tras el triunfo revolucionario del 1 de enero de 1959, con movilizaciones en las décadas de 1960, 1970, 1980 y 1990 para repeler ataques bélicos o terroristas desde Estados Unidos o Centroamérica, la revolución reaccionó a las marchas de julio y a la convocatoria para la protesta pacífica de este mes con una actitud sin precedentes… ante un adversario o enemigo diminuto en sus propias calles. "En el interior del país, sujetos que se sienten respaldados y protegidos por Washington, usando como bandera la difícil situación económica debido al bloqueo" que Estados Unidos impuso en 1962, "llaman a manifestaciones subversivas", denunció una carta de apoyo al régimen suscrita en el exterior por decenas de seguidores de la revolución.