CIUDAD DE MÉXICO, noviembre 24 (EL UNIVERSAL).- El 20 de enero de 2025, Donald Trump volverá a tomar posesión como Presidente de Estados Unidos de América y el auto que lo transportará al Capitolio de Washington, DC será "La bestia", uno de los vehículos más seguros del planeta. Te lo presentamos.
¿Cómo es el auto presidencial "La bestia"?
Diseñado exclusivamente para garantizar la seguridad y comodidad del presidente, "La bestia" es un vehículo blindado capaz de resistir disparos, explosiones, ataques químicos, granadas e incluso misiles.
Su estructura tiene la base de un camión pesado, impulsado por un motor V8 de doble turbocompresor que genera 300 caballos de fuerza, necesarios para mover sus 9 toneladas de peso.
Entre sus avanzados sistemas tecnológicos destacan las cámaras de visión nocturna, integradas en la parte delantera, lanzadores de gas lacrimógeno y humo útiles para despistar a posibles atacantes. Además, se encuentra equipado con un sistema satelital que permite contactar al Pentágono en caso de una emergencia.
"The beast" está preparado para enfrentar cualquier contingencia: sus neumáticos pueden seguir funcionando aunque estén ponchados y cuenta con un suministro interno de oxígeno, así como sangre compatible con la del presidente para contingencias médicas.
Como medida adicional de defensa, las puertas "esconden" ametralladoras, ello para garantizar la protección del presidente y sus acompañantes durante posibles atentados.
¿Qué otros autos han transportado a los presidentes de Estados Unidos?
El primer automóvil utilizado como transporte del presidente de los Estados Unidos fue el Lincoln Sunshine Special de 1939, comisionado por el Servicio Secreto como un "vehículo oficial". Este convertible también movilizó a Franklin D. Roosevelt y su sucesor Harry S. Truman.
Desde entonces, varios modelos del Lincoln han sido utilizados por los mandatarios del país, como el Cosmopolitan de 1950 y diferentes versiones del Continental en 1961, 1967 y 1974. Más tarde se introdujo el modelo Town Car en 1989.
En 1963, el asesinato de John F. Kennedy marcó el final de los autos presidenciales convertibles, dando paso a vehículos con techo fijo, blindaje completo y un sistema de alta seguridad.
Años después, la marca Cadillac lanzó el Fleetwood de 1982, elegido como el "auto oficial" por el entonces presidente Ronald Reagan.
Con George H. W. Bush (1989-1993), el Servicio Secreto decidió limitar la divulgación de detalles sobre los vehículos presidenciales para maximizar la seguridad, y fue durante su administración que el auto presidencial adquirió el apodo de "La bestia".
Hoy en día, "The beast" tiene la apariencia de un Cadillac One, pero con extensas modificaciones para soportar el peso de su blindaje y todas sus sofisticadas medidas de seguridad, que ningún otro vehículo tiene en el mundo.
Su estructura tiene la base de un camión pesado
"La bestia", auto antibalas que transportará a Donald Trump
Su estructura tiene la base de un camión pesado