El gobierno de Colombia anunció el miércoles la suspensión de las negociaciones de paz con el Ejército de Liberación Nacional (ELN), tras un ataque de la guerrilla contra una base militar en el noreste del país que dejó dos soldados muertos y 29 heridos.
El ataque ocurrió en Puerto Jordán, Arauca, y fue realizado con un camión cargado de explosivos. Por lo que la delegación del gobierno en la mesa de diálogo anunció en la red social X que los diálogos quedan suspendidos hasta que el ELN demuestre de manera clara su voluntad de paz.
Este acto de violencia ha sido uno de varios ataques del ELN desde agosto, cuando rompió una tregua pactada en negociaciones que venían realizándose desde 2022.
El presidente Gustavo Petro calificó el ataque como una "acción que cierra un proceso de paz con sangre" y visitó este miércoles a los soldados heridos en el Hospital Militar de Bogotá.
El ELN justificó su escalada de violencia como incumplimientos del gobierno en los acuerdos alcanzados.
El ministro de Defensa, Iván Velásquez, informó que las Fuerzas Militares redoblarán sus esfuerzos contra el grupo guerrillero, que cuenta con aproximadamente 5,800 miembros, y ofreció una recompensa por información sobre sus líderes.
Petro, que ha impulsado el diálogo con guerrillas y bandas criminales, enfrenta críticas de la oposición por el deterioro de la seguridad en el país.
En paralelo, el gobierno también mantiene diálogos con otros grupos disidentes de las extintas FARC, en su intento por desactivar el conflicto armado.