Líderes de 14 países de los 22 convocados a la Cumbre discutirán, durante dos días, importantes temas para el desarrollo de la región y uno de los principales será el acceso a financiamiento para países pobres.
Santo Domingo, República Dominicana.- La XXVIII Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno comenzó este viernes de manera oficial en la ciudad de Santo Domingo, con un acto celebrado en la fortaleza colonial de Ozama, la primera estructura militar permanente de América.
Los líderes iberoamericanos fueron recibidos uno a uno por el presidente de República Dominicana, el país anfitrión, Luis Abinader, su esposa, la primera dama Raquel Arbaje, y el secretario general iberoamericano, el chileno Andrés Allamand.
"Esta será una cumbre dedicada a las personas y dirigida a tener resultados concretos", dijo Allamand, el primero en intervenir en el acto inaugural de la reunión regional, que tendrá mañana su jornada principal con la celebración del plenario de sesiones.
Esto implica, afirmó Allamand en su discurso, "orientar la actividad asociada a esta reunión hacia la obtención de resultados concretos que tengan un impacto positivo en la calidad de vida de los iberoamericanos".
Para lograrlo, se someterá a la consideración de los países, tres instrumentos decisivos para cumplir los derechos y afianzar la Comunidad Iberoamericana: la Carta Medioambiental Iberoamericana, la Estrategia de Seguridad Alimentaria y la Carta de Principios y Derechos Digitales, precisó el secretario general iberoamericano.
Líderes de 14 países congregados en la Cumbre Iberoamericana buscarán en República Dominicana acuerdos sobre herramientas para abordar la difícil situación económica que dejó la pandemia de COVID-19, agravada por la invasión rusa en Ucrania.
América Latina, que enfrenta un "difícil" 2023 según el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), apuesta a mejores opciones de financiamiento y apoyo para enfrentar una crisis alimentaria que afecta a casi la cuarta parte de su población.
Los cancilleres de los países representados previo a la inauguración de la Cumbre sostuvieron una reunión previa para finiquitar el documento que suscribirán los jefes de Estado y gobierno.
Al margen del encuentro, el rey de España, Felipe VI, y el presidente chileno Gabriel Boric sostuvieron diálogos bilaterales con el mandatario anfitrión, Luis Abinader, en el Palacio Nacional. No hubo declaraciones.
La organización informó que destinaría espacios para otras reuniones bilaterales, aunque hasta el momento no se divulgó agenda.
La Cumbre Iberoamericana coincide además con la reunión de julio entre la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) y la Unión Europea, que se celebra el 17 y 18 de julio en Bélgica.