El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, otorgó un indulto a su hijo, Hunter Biden, el domingo 1 de diciembre, evitándole enfrentar una sentencia de prisión por cargos federales graves relacionados con posesión ilegal de armas y evasión fiscal.
Esta decisión marca un giro respecto a las declaraciones previas del mandatario, quien había asegurado en diversas ocasiones que no utilizaría sus facultades presidenciales para beneficiar a miembros de su familia.
Hunter Biden había sido declarado culpable en dos casos federales, uno en Delaware y otro en California.
En ambos casos, se le imputaron delitos, incluidos cargos por mentir en formularios de compra de armas y por no pagar más de $1.4 millones en impuestos.
Pese a sus promesas iniciales, el presidente Biden utilizó su poder de indulto, rompiendo una de sus promesas de no intervenir en los casos legales de familiares cercanos, lo que ha generado controversia entre sus opositores políticos.
El indulto llega poco después de que se declarara culpable en varios cargos, incluido el de posesión ilegal de un arma de fuego, por lo que enfrentaba una sentencia de hasta 25 años de prisión.
En el caso de evasión fiscal, los cargos implicaban una posible condena de hasta 17 años, aunque las pautas de sentencia federales sugerían una pena significativamente más baja.
Se esperaba que, bajo las circunstancias, Biden evitara una pena de cárcel, pero la situación dio un giro cuando un acuerdo de culpabilidad previo se vino abajo debido a las objeciones de un juez.
El presidente Biden, quien había defendido públicamente a su hijo durante años de controversias relacionadas con su adicción a las drogas, comentó en un comunicado que la decisión de otorgar el indulto se basó en la política y no en una cuestión de favoritismo.
Aseguró que, aunque cree en el sistema judicial, también considera que la política jugó un papel en los cargos contra su hijo, los cuales, según él, fueron instigados por opositores políticos para atacar su presidencia.
En su declaración, Biden reiteró que la investigación de su hijo fue impulsada por intereses políticos y no por hechos que justificaran los cargos en su contra.
"Ninguna persona razonable que analice los hechos en los casos de Hunter puede llegar a otra conclusión que no sea que fue señalado solo porque es mi hijo", agregó el mandatario.
Expresa Hunter Biden su agradecimiento
En un comunicado, manifestó su compromiso de utilizar su vida reconstruida para ayudar a aquellos que enfrentan problemas similares a los que él atravesó durante sus años de adicción. "He admitido y asumido la responsabilidad de los errores que cometí durante los días más oscuros de mi adicción", indicó Hunter.
El proceso judicial de Hunter comenzó en 2020, cuando reveló públicamente que era objeto de una investigación federal relacionada con sus finanzas y su posesión de un arma de fuego.
El indulto pone en evidencia las tensiones políticas
Los opositores del presidente, en especial los republicanos, han utilizado los problemas legales de su hijo como una herramienta para desacreditar su gobierno.
Las acusaciones de corrupción relacionadas con los negocios internacionales de Hunter Biden también han sido un tema recurrente en las críticas de la oposición, aunque el presidente Biden ha negado cualquier implicación en esos negocios.
Mientras tanto, el caso de Hunter Biden sigue siendo un tema de división en la política estadounidense, con algunos defendiendo la decisión del presidente como un acto de compasión familiar, mientras que otros lo ven como una violación de los principios de imparcialidad y justicia.
El indulto marca un nuevo capítulo importante en la transición Trump-Biden, donde próximamente el republicano asumirá la presidencia, junto con la fuerza de las cámaras, marcando un punto critico para el partido demócrata.