Las autoridades ambientales de Estados Unidos ordenaron detener temporalmente el envío de desechos contaminados desde el sitio del descarrilamiento de un tren en llamas a principios de este mes en el este de Ohio, cerca de la frontera con el estado de Pensilvania.
La administradora de la Región 5, Debra Shore, de la Agencia de Protección Ambiental, dijo el sábado que la agencia ordenó a Norfolk Southern “pausar” los envíos desde el lugar del descarrilamiento del 3 de febrero en East Palestine, pero prometió que la remoción del material se reanudará “muy pronto”.
“Todos quieren que esta contaminación desaparezca de la comunidad. No quieren preocuparse, y no quieren el olor, y le debemos a la población de East Palestine retirarlo de la comunidad lo más rápido posible”, dijo Shore.
Hasta el viernes, dijo Shore, la compañía ferroviaria había sido la única responsable de la eliminación de los desechos y proporcionó a las autoridades ambientales de Ohio una lista de los sitios de eliminación seleccionados y utilizados. En el futuro, los planes de retiro, incluyendo ubicaciones y rutas de transporte de los desechos contaminados, estarán sujetos a la revisión y aprobación de la EPA, dijo.
“La EPA se asegurará de que todos los desechos se eliminen de manera segura y legal en instalaciones certificadas por la EPA para evitar una mayor liberación de sustancias peligrosas e impactos en las comunidades”, añadió Shore. Dijo que las autoridades habían escuchado las preocupaciones de los residentes y estaban revisando “el transporte de algunos de estos desechos”.