Estados Unidos confiscó casi 2 mil armas desde octubre hasta marzo en el marco de la Operación de Norte a Sur destinada a combatir el tráfico de armamento hacia México, informó este miércoles la fiscal general adjunta estadounidense Lisa Monaco.
En un comunicado, la Casa Blanca habló sobre su estrategia de siete puntos para frenar el flujo de armas a México. Además de las armas, se confiscaron en el mismo periodo más de 80 mil rondas de municiones.
"Es una prioridad para Estados Unidos", tuiteó el embajador Ken Salazar, quien subrayó que su país está haciendo "todo lo posible" para evitar que las armas lleguen a los delincuentes mexicanos. "Identificamos a quien comete los crímenes y rastreamos las armas. Los criminales que trafican armas y los cárteles que llevan violencia y dolor a las comunidades serán perseguidos y llevados ante la justicia".
Los siete puntos de la estrategia del gobierno estadounidense son: ampliar las investigaciones sobre tráfico de armas de fuego; hacer que los traficantes rindan cuentas y desplegar nuevas autoridades; combatir el aumento de armas fantasma y otras armas peligrosas; frenar el suministro de armas ilegales; mantener el enfoque en las operaciones de salida de armas de EU y en la aplicación de la normativa; profundizar la colaboración con México e impulsar las investigaciones en curso.
El Departamento estadounidense de Justicia, indica el documento, creó el año pasado un nuevo grupo de lucha contra el tráfico de armas de los cárteles en la frontera suroeste que ya ha demostrado su eficacia, como el procesamiento en Arizona de Jorge Zuniga-Aguilera, acusado de traficar al menos 82 armas.
Se expandió también el acceso al sistema eTrace en México, lo que ha permitido hacer casi 12 mil rastreos en el año fiscal 2023; más de un tercio de ellos permitieron dar con el comprador.