Al menos varias decenas de personas perdieron la vida el domingo en N'Zérékoré, al sureste de Guinea, debido a enfrentamientos violentos entre aficionados durante un partido de fútbol, según información fuentes médicas a la AFP.
Un médico del hospital regional, que prefirió mantenerse en el anonimato, señaló que "hay un centenar de muertos" y agregó que la morgue local está llena.
Otro médico confirmó que se trataba de "décenas de muertos", pero no proporcionó detalles adicionales sobre las víctimas.
Diversos videos difundidos en las redes sociales mostraron escenas de cuerpos inertes en las calles, aunque la autenticidad de estos videos no pudo ser verificada por la AFP.
En algunos de los registros también se aprecian momentos de gran confusión, con multitudes corriendo por las calles después de que los enfrentamientos se desataran en el estadio.
La información sobre el incidente ha sido ampliamente compartida en plataformas sociales, lo que ha generado una creciente preocupación tanto a nivel local como internacional.
Por el momento, el Gobierno guineano no ha emitido ninguna declaración oficial sobre el trágico suceso, lo que ha aumentado la incertidumbre sobre las circunstancias exactas del enfrentamiento.
Fuentes locales han señalado que los altercados comenzaron debido a una protesta por una decisión del árbitro, lo que provocó que varios aficionados invadieran el terreno de juego.
Este incidente, que parece haber escalado rápidamente, derivó en una serie de disturbios violentos entre los hinchas y en la trágica pérdida de vidas humanas.
El partido de fútbol en cuestión formaba parte de un torneo en honor al general Mamadi Doumbouya, jefe de la junta militar de Guinea, quien llegó al poder en septiembre de 2021 tras un golpe de Estado.
Doumbouya fue investido presidente del país tras su ascenso, lo que ha generado una serie de tensiones en el contexto político y social de Guinea.
La conexión entre el evento y el régimen podría haber exacerbado la situación, sumando un componente de polarización política.