La Corte Penal Internacional (CPI) de La Haya emitió órdenes de detención contra el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, su exministro de Defensa Yoav Gallant y el líder del brazo armado de Hamás Mohamed Deif, por crímenes de guerra y de lesa humanidad.
Esta decisión provocó la ira de Netanyahu, que la calificó de antisemita. Israel rechaza con disgusto las absurdas y falsas acciones y acusaciones hechas, reaccionó.
Estados Unidos, principal aliado de Israel, rechazó las órdenes contra los dirigentes israelíes que, en cambio, fueron celebradas por organizaciones de defensa de los derechos humanos.
Netanyahu es oficialmente hoy un hombre buscado, declaró la secretaria general de Amnistía Internacional, Agnès Callamard.
La decisión de la CPI limita teóricamente los desplazamientos de Netanyahu, porque los 124 países miembros de la corte están obligados a arrestarlo en su territorio.
La sala emitió órdenes de detención contra dos individuos, Benjamin Netanyahu y Yoav Gallant, por crímenes de lesa humanidad y crímenes de guerra cometidos al menos desde el 8 de octubre de 2023 hasta el 20 de mayo de 2024», informó la CPI.
La corte añadió en otro comunicado que también pidió la detención de Deif, quien, según Israel, murió en un ataque en julio en el sur de Gaza.
La guerra entre Israel y Hamás se desencadenó el 7 de octubre de 2023, cuando milicianos islamistas mataron a 1.206 personas en el sur de Israel, en su mayoría civiles, y secuestraron a 251, según un balance de AFP basado en cifras oficiales israelíes que incluyen a los rehenes muertos en cautiverio.
La ofensiva militar lanzada en respuesta por Israel ha matado al menos a 44.056 personas en el territorio palestino, en su mayoría civiles, según datos del Ministerio de Salud del gobierno de Hamás, considerados fiables por la ONU.