El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, desterró este domingo a 17 sacerdotes, entre ellos, Rolando Álvarez e Isidoro Mora, quienes estaban detenidos en cárceles del país.
De acuerdo con un comunicado oficial del gobierno, la administración de Ortega envió al grupo de sacerdotes al Vaticano.
Fue el medio El 19 el encargado de dar a conocer la gratitud del gobierno con el Vaticano por haber recibido a los sacerdotes.
Cabe recordar que, durante los últimos años, Ortega ha estado acusando a varios líderes de la Iglesia Católica de actuar en contra de su gobierno, mientras que el clero local ha denunciado una fuerte persecución, a través de arrestos, pesquisas y otro tipo de estrategias.
Rolando Álvarez, quien se convirtió en una figura importante durante los últimos años, fue detenido en el 2022 y fue condenado a 26 años de prisión en un juicio señalado como político debido a sus fuertes críticas hacia Ortega.
Mientras que Isidoro Mora fue aprehendido a finales del mes de diciembre tras orar por su colega y por el resto de sacerdotes arrestados.
“Gracias a mi Dios ya se fue, desterrado, pero ya está libre”, declaró un familiar de los sacerdotes a medios internacionales.
Pese al envío del Clero hacia el Vaticano, parece que el conflicto entre Estado e Iglesia persistirá en Nicaragua.