El expresidente Donald Trump ha alcanzado una victoria contundente en las primarias presidenciales del Partido Republicano en Carolina del Sur, según proyecciones de medios como AP, NBC News y CNN, entre otros.
Esta victoria marca una continuación de la racha ganadora de Trump en cada contienda hasta el momento, consolidándolo como un fuerte contendiente para obtener la nominación presidencial del partido en el próximo mes.
En contraste, su rival, Nikki Haley, ha logrado ganar solo 17 delegados, mientras que Trump ha asegurado 92 hasta el momento.
La derrota de la exgobernadora de Carolina del Sur representa un golpe significativo en su estado natal.
En la contienda del sábado, un total de 50 delegados estuvieron en juego, divididos entre el ganador estatal y el ganador de cada distrito del Congreso.
El desempeño dominante de Trump en las encuestas a pie de urna y los primeros resultados sugieren la posibilidad de un barrido limpio.
A pesar de enfrentar acusaciones penales en cuatro jurisdicciones distintas y sanciones civiles por cientos de millones de dólares, Trump parece encaminarse hacia la nominación presidencial del partido.
Se espera que alcance los mil 215 delegados necesarios para asegurarse a mediados de marzo, especialmente con varios estados celebrando primarias en el SuperMartes, donde el ganador se lleva todos los delegados.
Aunque Haley ha sufrido una derrota en su estado natal, ha dejado en claro que esto no la sacará de la carrera en el corto plazo.
Se ha comprometido a continuar haciendo campaña durante las competencias del Supermartes el próximo mes, ya que tiene planeado un viaje a través del país que comenzará el domingo, con el objetivo de asegurar su posición en la contienda presidencial republicana.
El Partido Republicano se enfrenta a una coyuntura crucial con la victoria de Donald Trump en las primarias de Carolina del Sur.
Por lo que la contundencia de su triunfo sugiere una consolidación del liderazgo del expresidente dentro de la misma agrupación, a pesar de las divisiones internas que han caracterizado al partido en los últimos años.
La capacidad de Trump para mantener una base sólida de apoyo, a pesar de los desafíos legales y las sanciones civiles en su contra, plantea interrogantes sobre el futuro ideológico y estratégico del partido.
Por otro lado, el historial político de Nikki Haley aporta una perspectiva interesante a la contienda.
Como exgobernadora de Carolina del Sur y embajadora de Estados Unidos, Haley ha desempeñado roles prominentes en el escenario político nacional.