Londres.- Parlamentarios australianos demandaron al primer ministro británico Boris Johnson que impida la extradición de Julian Assange, fundador de Wikileaks, a Estados Unidos y aseguraron que su salud mental y física está deteriorada.
George Christensen, del gobernante Partido Liberal Nacional, y el independiente Andrew Wilkie, visitaron este martes a Assange en la prisión de máxima seguridad de Belmash, en el sureste londinense, tras la cual dijeron que el periodista se encuentra bajo fuerte presión.
Añadió que en la próxima sesión de extradición de Assange, podría conocerse información que preocuparía a los australianos sobre este caso, la cual dejó sin detallar.
Por su parte en declaraciones a la prensa por separado, Wilkie, copresidente del grupo parlamentario "Traigan a Julian Assange a Casa", advitió que conceder la extradición a Estados Unidos sería un precedente peligroso, citó la edición electrónica de The Guardian.
Assange enfrenta en Londres el proceso para ser extraditado a Estados Unidos, donde se le juzgaría por conspiración para robar información clasificada de una computadora del departamento de Defensa.
Extraditar a Assange establecería el precedente de que si un periodista hace algo que ofenda a cualquier gobierno en el mundo, enfrentaría la posibilidad real de ser enviado a ese país, explicó el parlamentario independiente.
Este es un caso político y lo que está en juego no es solo la vida de Julian Assange, sino es acerca del futuro del periodismo, subrayó.
En Estados Unidos el periodista alemán fundador de un sitio especializado en la publicación de información sensible obtenible de filtraciones, enfrentaría 18 cargos, 17 de ellos bajo el Acta de Espionaje.