Tegucigalpa, Honduras.- La Policía Militar de Orden Público (PMOP) de Honduras informó este lunes que decomisó armas de fuego al iniciar operaciones para tratar de pacificar las prisiones, tras la matanza de 46 reclusas la semana anterior.
El comandante de la PMOP, coronel Fernando Muñoz, presentó ante la prensa un fusil y cinco revólveres con munición, dos granadas de fragmentación y aparatos móviles de comunicación, en el primer decomiso en la Penitenciaría Nacional (PN) de hombres, en Támara, 25 km al norte de la capital.
La operación fue ordenada por la presidenta Xiomara Castro, después de que el martes pasado en la cárcel de mujeres, ubicada en la zona de Támara, reclusas de la pandilla Barrio 18 salieron de su módulo e irrumpieron en el que estaban las rivales de la Mara Salvatrucha (MS-13). Las atacaron a tiros y prendieron fuego al centro y el saldo fue de 46 fallecidas.
Castro ordenó el miércoles que la PMOP tome el "control de los 21 centros penales del país" a partir del 1 de julio próximo, pero Muñoz dijo que adelantó por sorpresa las operaciones.
Después de entrar al módulo de la 18 "vamos a entrar al módulo donde está la MS, que también es de máxima [seguridad]", añadió Muñoz.
"Solo hay una manera que entren", añadió en alusión a que los pandilleros han sobornado a los guardias de la prisión para ingresar armas. Pero "aquí se acabó la corrupción en los centros penales", prometió.
El ministro de Seguridad, Gustavo Sánchez, encabezada la llamada "operación Candado", de cateos y retenes en Choloma, donde el domingo entró un toque de queda.