Haití conmemora hoy los 216 años de su independencia del colonialismo francés, siendo la primera lucha independentista triunfante en el continente americano.
En 1804 Haití se convirtió en la primera nación independiente en la América insular tras una exitosa revuelta de esclavos. Desde que llegó Colón a la isla en 1492, era parte del imperio español.
Pero en 1697, Madrid le cedió a Francia formalmente un tercio de la antes conocida como La Española. Con ello los galos convirtieron a Saint-Domingue en una de las colonias más ricas del mundo y con gran lucro en el Caribe por su proliferación de plantaciones de azúcar, café y otros productos como añil y algodón.
Para garantizar la producción en las plantaciones, los franceses utilizaban gran cantidad de esclavos para trabajar en condiciones inhumanas, razón por la que ocurrirán masivas importaciones de nuevos esclavos. En las últimas décadas del colonialismo se importaron hasta 30 mil esclavos por año, de acuerdo con el historiador Frank Moya Pons.
Tras la Revolución Francesa de 1789, los denominados gens de couleur y los esclavos comenzaron a cuestionar la aplicación de la Declaración de los Derechos Humanos del Hombre en su situación.
Por lo que para 1791, el esclavo jamaicano Dutty Boukman se convirtió en el líder de los esclavos africanos en una gran plantación e inspirados por la revolución en París, los esclavos destruyeron plantaciones y ejecutaron a todos los blancos de la región.
Más de 30 mil combatientes destruyeron haciendas y casi toda la infraestructura relacionada con el sistema esclavista, pese a que el sacerdote y líder esclavista fue ejecutado.
La guerra civil duró 12 años contra las fuerzas de Napoléon Bonaparte. El 1 de enero de 1804, Haití declaró su independencia y Jean-Jacques Dessalines se convirtió en su primer gobernante, inicialmente como gobernador general, y después como emperador Jacques I de Haití, como él se designó.
Para reconocerla como una nación independiente, Francia exigió el pago de “reparaciones” por 150 millones de francos oro, lo que representaba 10 veces los ingresos anuales del país por lo que le tardó 122 años en pagarla.