Las fuerzas israelíes dijeron el domingo que han ampliado su ofensiva terrestre contra el grupo Hamás a "todas las partes" de la Franja de Gaza.
Israel reanudó el viernes pasado su ofensiva luego que acabó una tregua de una semana.
Tras enfocar sus operaciones terrestres en el norte de Gaza las últimas semanas, Israel empezó a realizar ataques aéreos contra el sur también.
La gran mayoría de la población ha huido al sur en busca de seguridad.
Pero ayer en la tarde, el vocero militar israelí, almirante Daniel Hagari, dijo que el ejército en tierra también está avanzando en el sur.
"El ejército israelí está continuando y expandiendo la operación terrestre contra la presencia de Hamás en todas las partes de la Franja de Gaza", afirmó.
El ejército israelí ordenó el domingo la evacuación de más zonas en la segunda ciudad más grande de la franja de Gaza, Jan Yunis, y sus alrededores, y siguió con sus intensos bombardeos, conforme su ofensiva se desplazaba a la mitad sur del territorio, donde dijo que se ocultaban muchos líderes de Hamás.
Los palestinos de Gaza dijeron que ya casi no tienen a dónde ir. La Franja de Gaza, un territorio estrecho entre Israel y Egipto, está sellada. Muchos de sus 2.3 millones de habitantes están atestados en el sur luego que Israel ordenó a la población civil abandonar el norte del enclave al inicio de la guerra, iniciada por el ataque de Hamás contra Israel, en que el grupo palestino mató a unas 1,200 personas, en su gran mayoría civiles, y secuestró a otras 240.
Previo a las órdenes de evacuación más recientes, monitores de Naciones Unidas dijeron que las zonas bajo órdenes de evacuación constituyen alrededor de una cuarta parte del territorio.
Durante la noche y la madrugada se reportaron intensos bombardeos en la zona de Jan Yunis y de la ciudad sureña de Rafah, así como partes del norte que eran el blanco principal de la dura campaña aérea y terrestre israelí.
Juliette Toma, directora de comunicaciones de la agencia de la ONU para refugiados palestinos, dijo que cerca de 958,000 personas estaban en 99 instalaciones de la ONU en el sur de la Franja de Gaza.
El comisionado de derechos humanos de la ONU, Volker Türk, llamó al fin de la guerra, afirmando que el sufrimiento de los civiles era "imposible de soportar".
Con la reanudación de los combates menguaron las esperanzas de negociar otra tregua temporal. Un cese el fuego que duró una semana había facilitado la liberación de docenas de rehenes israelíes y extranjeros en Gaza y de palestinos encarcelados por Israel.
"Seguiremos librando la guerra hasta que alcancemos todos sus objetivos, y es imposible alcanzar esos objetivos sin la operación terrestre", dijo el primer ministro, Benjamin Netanyahu, en un mensaje televisado el sábado por la noche.
Osama Hamdan, funcionario de Hamás, dijo que cualquier reanudación de negociaciones sobre futuros intercambios tendrán como condición un cese de fuego permanente.