Con las encuestas empatadas, Donald Trump y Kamala Harris están llevando a cabo sus últimos esfuerzos por movilizar a los votantes a pocas horas de unas elecciones presidenciales que generan gran expectación a nivel global.
Ambos candidatos hacen un llamado desesperado a los estadounidenses para que acudan a las urnas.
La tensión electoral se siente en cada discurso, donde ambos buscan conquistar a los indecisos en un contexto de alta incertidumbre.
Durante una mitin en Pensilvania, Harris animó a los votados con un contundente "¡Vamos a votar! ¡Vamos a ganar!", destacando la importancia de este estado, que cuenta con 19 votos electorales.
Harris cerrará su campaña en Filadelfia con la participación de estrellas como Lady Gaga y Ricky Martin.
Por su parte, Trump también hizo un fuerte llamado al voto en un mitin en Pensilvania, expresando su impaciencia: "¡He estado esperando esto durante cuatro años! Y tú también".
En otro evento en Carolina del Norte, el expresidente advirtió que si movilizan a los votantes, "no habrá nada que puedan hacer" sus opositores.
Ambos candidatos han intensificado sus esfuerzos en las últimas horas, en medio de un récord de más de 80 millones de votantes que ya han ejercido su derecho al voto anticipado.
Esta contienda es histórica, ya que por primera vez, Estados Unidos se enfrenta a una elección entre dos candidatos con visiones tan polarizadas.
El clima electoral se complica aún más con las advertencias de fraude electoral por parte de Trump, lo que despierta temores sobre su posible negativa a aceptar los resultados si pierde, como ocurrió en 2020.
El equipo de campaña de Harris prevé que Trump se declare ganador antes de que finalice el escrutinio, lo que podría desestabilizar el proceso.