Nueva York pretende reducir la cantidad de indigentes en los refugios civiles encerrando a los migrantes en una prisión federal, en el Centro Correccional de Manhattan.
Este lugar fue conocido por contener tras las rejas a mafiosos de cuello blanco, además de terroristas y estafadores que alguna vez trabajaron en Wall Street.
La presión fue clausura indefinidamente luego del suicidio del depredador e influyente de Estados Unidos, Jeffrey Epstein, el 10 de agosto del 2019, poco después de haber sido recluido en una de sus celdas.
Personalidades del crimen como Osama Bin Laden y Joaquín "El Chapo" Guzmán también estuvieron en la prisión.
De acuerdo con medios locales, desde el año pasado, a Nueva York han llegado alrededor de 100 mil migrantes desde la frontera con México, lo que ha provocado el disgusto de más de un político en el estado y en la ciudad.
Pese a ello, el alcalde Eric Adams reiteró la obligación de la ciudad de encontrar refugio para quienes lo necesiten, por lo que se adaptaron hoteles, centros recreativos y gimnasios para acomodar a ls visitantes indocumentados.
La propuesta de rehabilitar la desgastada prisión fue enviada a las autoridades de la ciudad el pasado 9 de agosto, subrayando las condiciones en las que se encuentra y la cantidad de migrantes que están llegando a la ´Gran Manzana´.
Cabe remarcar que los migrantes no están siendo considerados presos, además de que la mayoría de estos entraron con su documentación oficial en mano a Estados Unidos, sin embargo, la idea, en el ojo público despierta incomodad y rechazo al querer albergarlos en un lugar descuidado con bastantes fallas estructurales.
Sobre ello, el director ejecutivo de Coalición para la Inmigración de Nueva York, Murad Awawedh, el lugar debería estar "fuera de la mesa" de manera "definitiva".
"El Centro Metropolitano fue una prisión famosa por su mal estado y no es un sitio adecuado para apoyar a la gente que está tratando de construir una nueva vida en este nuevo país".