Este domingo se confirmó que el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, será operado debido a una hernia, la cual fue encontrada tras una revisión médica de rutina.
De acuerdo con el comunicado oficial de su oficina, Netanyahu será anestesiado por completo durante el procedimiento quirúrgico.
Por su ausencia, el viceprimer ministro Yariv Levin tomará su lugar durante el lapso de la operación y la recuperación de Netanyahu.
Pese a la hernia, los médicos del funcionario aseguran que goza de buena salud, así que esperan una pronta recuperación de su parte.
A partir de la ofensiva de Hamás del 7 de octubre, Israel comenzó una serie de ataques aéreos y terrestres que han dejado más de 30 mil palestinos muertos y más de un millón de personas desplazadas en Gaza, a casi seis meses de haber iniciado el contraataque.
Sobre ello, Netanyahu se ha opuesto varias veces al cese al fuego, asegurando que esto sólo ocurrirá cuando Hamás haya sido exterminado.
Las acciones israelíes han sido fuertemente criticadas por la comunidad internacional e incluso, hace un par de meses, Sudáfrica señaló a Israel de cometer un genocidio en Gaza, acusación respaldada por otros países que conforman la ONU.
Esta semana, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas aprobó un alto al fuego en la Franja, tras 14 votos a favor y una abstención por parte de Estados Unidos, nación que generalmente apoya a Israel.
Ello no fue del agrado de Netanyahu, quien canceló las visitas de sus asesores a Washington y subrayó que se trataba de un retroceso respecto a su posición y en la guerra contra Hamás.
Negociaciones sin avances
El domingo ocurrió una nueva ronda de negociaciones en El Cairo, Egipto, con el objetivo de alcanzar un alto el fuego en la Franja de Gaza.
Sin embargo, la ausencia de representantes de Hamás en la mesa de diálogo y las crecientes tensiones entre las partes involucradas han ensombrecido las perspectivas de avance.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, acusó a Hamás de endurecer sus demandas durante las conversaciones, mientras prometió mantener la presión militar sobre el grupo islamista.
Las negociaciones buscaban un alto el fuego de seis semanas a cambio de la liberación de parte de los rehenes aún en manos de Hamás.
Por su parte, un representante de Hamás declaró que las posiciones entre ambas partes están demasiado distantes, criticando la supuesta falta de seriedad de Netanyahu y la ausencia de una presión efectiva por parte de Estados Unidos, principal aliado de Israel.
Mientras tanto, la Organización Mundial de la Salud (OMS) denunció un ataque del Ejército israelí al Hospital Al-Aqsa en Gaza, dejando al menos cuatro muertos y 17 heridos, lo que eleva el número total de palestinos fallecidos a 77 en las últimas 24 horas, según el Ministerio de Salud local.
Piden renuncia de Netanyahu
En una manifestación masiva, con decenas de miles de personas exigiendo la dimisión del primer ministro Benjamin Netanyahu. Gritos de "¡Elecciones!", "¡Netanyahu debe irse!" y "¡Traigan de vuelta a los rehenes ahora!" resonaron entre los manifestantes.
La protesta incluyó a familiares de los ciudadanos secuestrados por Hamás el 7 de octubre, quienes instan al Gobierno a llegar a un acuerdo con el grupo palestino para la liberación de sus seres queridos. Además, detractores de la gestión de Netanyahu durante la guerra expresaron su descontento, considerando que él y su Gobierno han manejado mal la situación.
A pesar de las críticas, Netanyahu parecía ignorar las demandas de renuncia. Mientras la manifestación se desarrollaba en su contra, el mandatario ofrecía una conferencia de prensa, argumentando que unas elecciones en medio de la guerra paralizarían a Israel y obstaculizarían las negociaciones para la liberación de los rehenes.