Dos atacantes detonaron una bomba frente a los edificios de gobierno en la capital de Turquía, Ankara.
Las autoridades de seguridad reportaron que se trató de un atentado terrorista, dejando a los dos agresores muertos y a dos policías lesionados.
Posteriormente, militantes kurdos se apropiaron el atentado, el primero en la capital desde el año 2016, ocurriendo en el corazón de la ciudad.
Cabe subrayar que el mismo grupo, identificado como Kurdistan Worker`s Party (PKK) fue la misma organización que causó los ataques en Ankara, hace siete años.
El hecho ocurrió poco después de que los legisladores regresaran al parlamento de Ankara tras un descanso de tres meses.
Recep Tayyip Erdogan, el presidente de Turquía calificó los ataques de ser "los más recientes aleteos del terrorismo", añadiendo que el terrorismo nunca ha logrado sus objetivos en el país.
Sin embargo, el grupo terrorista kurdo emitió un comunicado señalando que el ataque ocurrió "exactamente como fue planeado, sin obstáculo alguno", además de indicar que se indicó esa ubicación exacta para evitar más decesos.
El atentado se registró alrededor de la 9:30, cerca del parlamento turco.
Tras este y otros ataques ocurridos en los últimos años, el gobierno de Erdogan estaría planeando estrategias constantes de revisión alrededor de Ankara y el país para evitar hechos similares.