Un vehículo bomba mató este lunes a un alto mando militar de Rusia en el sur de Moscú, horas después de que representantes rusos y ucranianos mantuvieran conversaciones por separado en Miami sobre un plan para poner fin a la guerra.
Kiev no ha hecho comentarios sobre la muerte del alto general, pero los investigadores rusos señalaron que estaban investigando si la explosión estaba "relacionada" con los "servicios especiales ucranianos".
Desde el inicio de la ofensiva rusa contra Ucrania en febrero de 2022, Kiev ha sido acusado reiteradamente de ser responsable de ataques contra personalidades y mandos militares en Rusia y en zonas ocupadas por Moscú en la exrepública soviética vecina.
El teniente general Fanil Sarvarov, de 56 años, era el director del departamento de formación operativa del Estado Mayor. Falleció en un barrio residencial del sur de Moscú cuando el artefacto colocado bajo su vehículo explotó.
Los reporteros de la AFP presentes en el lugar vieron un SUV Kia blanco destrozado, con las puertas y la ventana trasera reventadas. El chasis estaba retorcido y carbonizado por la explosión.
Las fuerzas de seguridad acordonaron la zona y los investigadores examinan los escombros.
El Comité de Investigación de Rusia, que investiga delitos graves, afirmó que estaba "trabajando en varias líneas de investigación sobre el asesinato. Una de ellas implica la posible organización del crimen por parte de los servicios especiales ucranianos".
Sarvarov luchó en las campañas del ejército ruso en el Cáucaso Norte, incluida la de Chechenia en la década de 1990, según indica su biografía oficial en el portal del Ministerio de Defensa.
También comandó las fuerzas rusas en Siria en 2015-2016.
Siguen las conversaciones
El Kremlin aún no se pronunció sobre el asesinato del lunes, que se produjo después de tres días de conversaciones en Miami y en un momento en que Estados Unidos intensifica sus esfuerzos para negociar el fin de la guerra.
El negociador ucraniano Rustem Umerov y el emisario especial estadounidense Steve Witkoff elogiaron el domingo el "progreso" de las negociaciones.