Asegura Israel interceptar cohetes disparados desde Gaza

El ejército israelí comenzó la retirada de Yenín.

Tel Aviv, Israel.- Los disparos de proyectiles hicieron sonar las sirenas de ataque aéreo en la ciudad sureña de Sderot, informó el ejército israelí.

El ejército israelí informó que cinco cohetes fueron lanzados a Israel desde la Franja de Gaza, pero que todos fueron interceptados.

"Cinco cohetes fueron lanzados desde la Franja de Gaza hacia territorio israelí. La defensa aérea desplegada por la FDI (Fuerza de Defensa Israelí) interceptó exitosamente todos los cohetes lanzados", indicó el ejército en un comunicado.

Inicialmente ninguna facción palestina se atribuyó la acción.

El ejército agregó que las sirenas se activaron en la ciudad sureña de Sderot.

Los cohetes fueron lanzados tras una operación israelí a gran escala en Cisjordania ocupada a primera hora del lunes.

Doce palestinos y un soldado israelí murieron desde el inicio del operativo en el campo de refugiados de Yenín.

RETIRADA

El ejército israelí comenzó la retirada de tropas del campo de refugiados de Yenín este martes mientras que la cifra de muertos se elevó a 12.

La redada en el campo de refugiados, lanzada la madrugada del lunes bajo el gobierno del primer ministro Benjamin Netanyahu, empleó a cientos de soldados, así como ataques con drones y excavadoras del ejército que destrozaron las calles.

"Estamos completando todos nuestros objetivos en Yenín", declaró Netanyahu sobre la operación, la de mayor envergadura en Cisjordania ocupada desde la Segunda Intifada.

El Ministerio de Salud palestino confirmó que la cifra de muertos en Yenín se elevó a 12, entre ellos cuatro menores, aunque servicios de emergencia como la Media Luna Roja reportaron que han atendido a varios heridos graves de bala y que incluso han trasladado algunos cuerpos a los hospitales.

"No permitiremos que Yenín vuelva a ser una ciudad refugio para el terrorismo. Erradicaremos el terrorismo dondequiera que este", manifestó Netanyahu.

El operativo dejó un rastro de devastación en el campo, la cual ha obligado a más de 3 mil personas de entre los casi 20 mil residentes a abandonar sus hogares para huir de la violencia.

Además, las tropas israelíes confiscaron más de mil armas en la ciudad y el campo y detuvieron unos 150 palestinos. También desmantelaron escondites de 14 sospechosos buscados, decomisaron decenas de kilogramos de materiales químicos para la fabricación de explosivos y desactivaron al menos cuatro dispositivos explosivos.