Las miradas de toda Europa se dirigieron este jueves hacia Holanda, uno de los socios fundadores de lo que hoy se conoce como la Unión Europea (UE).
Países Bajos concentró la atención de la Europa rica no sólo por ser la nación que dio el banderazo de salida al maratón electoral convocado para renovar la planilla del Parlamento Europeo, sino porque había el temor de que fuera la primera víctima de la marcha imparable de las agrupaciones populistas de extrema derecha.
Si bien los resultados definitivos serán divulgados hasta el domingo, una encuesta a pie de urna realizada por encargo de la televisión pública NOS, confirmó el temible avance de la fracción de extrema derecha, el Partido por la Libertad (PVV) de Geert Wilders, aunque no en la magnitud que muchos anticipaban.
En los comicios generales de noviembre pasado, el PVV emergió sorpresivamente como la fuerza política más votada en Holanda y como el ganador absoluto en las urnas.
En las europeas, ya no aparecieron solos en la cúspide, sino en un virtual empate con el bloque conformado por los verdes y laboristas (GroenLinks-PvdA), quienes poco a poco han ido regresando en la preferencia del electorado naranja; fueron los segundos más votados en noviembre.
De acuerdo con el último sondeo a pie de urna realizado por la firma Ipsos I&O, el frente GroenLinks-PvdA, pertenecientes a la familia de los Verdes y el Partido Socialista en el Parlamento Europeo, podría llevarse ocho escaños, uno menos que en las elecciones europeas anteriores, celebradas en 2019.
En tanto que el PVV certificaría su preferencia en el electorado holandés consiguiendo eventualmente siete escaños, un avance de seis puestos con relación a la edición electoral anterior.
El partido liberal VVD, que desde 2010 ha gobernado Holanda bajo el mando del premier Mark Rutte, provisionalmente se quedaría con cuatro escaños, mientras que los democristianos CDA y Demócratas 66, obtendrían tres escaños cada uno. El BBB, movimiento de reciente creación en nombre de los campesinos holandeses, debutaría en la Eurocámara con dos eurodiputados.
El Partido Foro para la Democracia, la versión neerlandesa de la derecha alternativa, el movimiento de extrema derecha y nacionalista blanco en EU, obtuvo en 2019 cuatro escaños. Para la legislatura 2024- 2029 habrían quedado fuera.
De confirmarse los resultados, la derecha radical y xenófoba holandesa tendría en los comicios un crecimiento neto en el Parlamento Europeo de dos escaños, si consideramos que entre el PVV y Foro para la Democracia sumaban cinco en 2019.
En otras palabras, la proporción entre partidos eurocríticos y proeuropeos prácticamente seguiría siendo similar a la de hace cinco años. Es decir, dos tercios de los 31 cargos asignados a Holanda en el Parlamento Europeo, alrededor de 21, continuarían en manos de partidos que piensan que es en el interés de Holanda tener una Europa fuerte. El resto se lo reparten los ultras, los proteccionistas y quienes piensan que la UE no debe continuar expandiéndose.
Las elecciones europeas constituyen el ejercicio democrático más grande del mundo después de la India. En total están convocados a las urnas 361 millones de personas en 27 países para elegir a los integrantes al Parlamento Europeo, la única institución de la UE electa por sufragio universal directo. Como ajuste a salida del Reino Unido de la UE en 2020, la próxima legislatura contará con 720 miembros, en lugar de 705. Los eurodiputados tomarán el cargo a partir del 16 de julio.
Luego de los holandeses, toca el turno este viernes a los irlandeses y checos, y el sábado, a los letonios, malteses, eslovacos e italianos. El resto de los países miembros vota el domingo. República Checa e Italia le dedican dos días a la jornada. Para evitar que los procesos electorales en otros países impacten en el resultado, hasta el domingo se divulgarán resultados oficiales. Los sondeos prevén que el Partido Popular Europeo continúe siendo la fuerza más grande en la Eurocámara, lo que favorecería a la alemana Ursula von der Leyen, quien espera renovar su mandato como presidenta de la Comisión Europea. De seguir la tendencia marcada por Holanda, según las previsiones, Identidad y Democracia, el grupo de extrema derecha en el PE y al que pertenece el PVV, crecerá sustancialmente.