Al menos 21 personas fallecidas y 18 lesionadas dejó este martes el choque y caída de un autobús cerca de Venecia, al norte de Italia.
Según los reportes, el vehículo transportaba turistas que regresaban de un paseo por la localidad de Marghera, tras pasar todo el día en Venecia.
Los oficiales reportaron que el autobús cayó desde una altura cercana a los 30 metros e impactó muy cerca de las vías del tren, en la entidad de Mestre.
Tras el fuerte impacto, el pesado vehículo se incendió, por lo que se requirió de la presencia de bomberos en el lugar del siniestro.
La lista de pasajeros incluida ucranios, alemanes y franceses, además, dos de las personas fallecidas eran niños; el conductor también perdió la vida en el accidente.
"El autobús está hecho pedazos. Los bomberos tuvieron problemas para sacar los cuerpos del vehículo", declaró el prefecto de Venecia, Michele Di Bari.
Por su parte, el ministro de interiores de Italia, Matteo Piantedosi, subrayó que el autobús "voló 30 metros".
Además, indicó que el vehículo funcionaba a base de metano, por ello es que se incendio de manera repentina.
Hasta el momento, se desconocen las causas del trágico accidente.
Por su parte, el alcalde de Venecia, Luigi Brugnaro, se declaró impactado por lo ocurrido y añadió que es una "escena apocalíptica".
Asimismo, la primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, externó sus condolencias a través de su cuenta oficial de X.
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, también envió sus condolencias a través de redes, subrayando que sus "pensamientos se encuentran con el pueblo de Italia, las familias y seres queridos de las víctimas de esta terrible tragedia".