La 81 Muestra Internacional de Arte Cinematográfico llegó a su fin con el León de Oro para La habitación de al lado, del cineasta Pedro Almodóvar.
Ya se vislumbraba su reconocimiento desde que desató una ovación al llegar a la alfombra roja de la ceremonia de clausura en el Lido veneciano.
No dudó en firmar autógrafos y hacerse fotos, hasta que cerraron las puertas de la Gran Sala, donde Isabelle Huppert pronunció su nombre, desatando la segunda ovación de la noche para él.
Después de agradecer a su familia y amigos, el director dio un discurso en castellano, en el que expresó su admiración por las dos actrices protagonistas, Tilda Swinton y Julianne Moore.
Aprovechó para hablar sobre el "derecho fundamental" a una muerte digna, tema central de su conta, que narra la historia de una mujer en agonía y de la persona que decide acompañarla. "Morir dignamente es un derecho fundamental de todo ser humano; no es un asunto político. Sé que atenta contra cualquier religión, pero yo le pediría a los practicantes de cualquier credo que respeten. El ser humano debe ser libre para vivir y para morir cuando la vida sea insufrible", dijo provocando el aplauso de pie.
En la rueda de prensa posterior, el realizador explicó lo estrecha que su carrera ha estado a la democracia en España: "Es imposible explicar cómo se vive bajo (Francisco) Franco (expresidente del Gobierno de España) y en la democracia. Es una experiencia extraordinaria para la que no hay palabras", apuntó el realizador, quien ya tenía un León de Oro, pero honorífico. "Este me tiene contentísimo. Una vez que lo tienes, te vuelves adicto al premio. A partir de ahora, no podría vivir sin el León", dijo.
El director aprovechó para reiterar su postura política, al declararse "optimista" porque cree que "lo peor que puede ocurrir es que la ultraderecha y el neoliberalismo vayan juntos y pidió estar atento a las próximas elecciones de EU.
El francés Vincent Lindon ganó el premio a Mejor Actor por su interpretación de un padre viudo en The quiet son, mientras que el galardón a Mejor Director fue para Brady Corbet por The brutalist, una película que explora la arquitectura como medio para expresar el trauma.
El Gran Premio del Jurado lo ganó el italiano Vermiglio, de Maura Delpero. El Premio Especial fue para April, de Dea Kulumbegashvili.