Este miércoles 22 de marzo, a los 65 años de edad, Rebecca Jones perdió la batalla contra el cáncer de ovario que se le detectó en 2017 y aunque durante un par de años pensó que lo había superado, desafortunadamente la salud comenzó a menguarse de nuevo a mediados de 2022.
SE FUE TRANQUILA
Danna Vázquez, representante de la actriz, en entrevista con "Venga la alegría" dijo que Rebecca luchó hasta el final, "hasta que su cuerpo no pudo más", sin embargo, aseguró que la actriz se fue "tranquila" y en "paz", de la misma forma en que deseaba que sus seguidores la observaran, pues su representante compartió que Jones siempre procuró mostrarse guapa y fortalecida a la imagen del público.
Además, Danna contó que ayer pudo despedirse de la actriz, a lado de Maximiliano, su único hijo, y la familia de Jones.
"Todos estaban muy tranquilos, ella nos preparó para que esta transición fuera en paz, más tranquila, que fuera de la manera en que ella quería, y como decía que 'la muerte te sorprende en vida'", detalló.
CÁNCER UNA "BENDICIÓN"
Jones vivió su enfermedad agradecida con la vida, pues al ser diagnosticada con cáncer de ovario, la actriz aprendió a valorar cada una de las cosas que la vida le ha regalado.
Se dijo afortunada porque, en el proceso, aprendió a conocerse y a disfrutar de tener las posibilidades de enfrentar su padecimiento sin preocupaciones como las económicas, pues es consciente de que no todas las personas tienen las mismas oportunidades de tratarse tal y como ella lo hizo.
TRAYECTORIA
Rebecca Jones Fuentes Berain nació en la Ciudad de México el 21 de mayo de 1957. Durante su juventud estudió teatro en el Orange Coast College en Estados Unidos y con 25 años comenzó su larga trayectoria artística en la telenovela "El amor nunca muere" (1982).
Tras este éxito le siguieron otras producciones como "El maleficio", "La traición", "Angelical" y "El ángel caído" hasta que llegó "Cuna de lobos" (1986), el proyecto que la catapultó internacionalmente.
Esta telenovela actuó a lado de su entonces esposo, Alejandro Camacho, además de Gonzalo Vega, Diana Bracho, Carmen Montejo y con la mejor villana de todos los tiempos, María Rubio en el papel de "Catalina Creel".
Curiosamente, en la vida real Rebecca Jones también tuvo problemas para embarazarse, igual que su personaje de "Vilma de la Fuente de Larios" en "Cuna de Lobos", por lo que tuvo que someterse a un tratamiento y en 1989 recibió a su único hijo, Maximiliano Camacho Jones, producto de su matrimonio con Alejandro Camacho.
Su más reciente proyecto fue en la producción de 2022 "Cabo", la cual tuvo que abandonar debido a una recaída en su estado de salud que la llevó a hospitalizarse debido a una deficiencia pulmonar y una neumonía que la mantuvo internada durante algunos días.
El teatro fue su otra gran pasión y actuó en las obras "El coleccionista", "La visita de la bestia", "Casémonos juntos", "Cómo aprendí a manejar", "El curioso incidente del perro a medianoche" y "Por verte, una vez más".
En cine, Jones trabajó en las películas "Gringo mojado", "Vacaciones separadas", "Amorosos fantasmas", "El misterio de Trinidad", "Alta infidelidad" y "Tercera llamada", donde personificó a una actriz en decadencia que lucha por mantenerse vigente.