Médico involucrado en muerte de Matthew Perry se declarará culpable

El médico Mark Chavez, compareció este viernes ante los fiscales.

Uno de los dos médicos de California vinculados a la investigación por la muerte por sobredosis del actor Matthew Perry se declarará culpable en las próximas semanas de conspiración para la distribución de ketamina, de acuerdo con "The Hollywood Reporter".

El médico Mark Chavez, de 54 años comparecerá primero ante un tribunal este viernes en una audiencia de fianza y lectura de cargos, según Ciaran McEvoy, portavoz de la Fiscalía de los Estados Unidos.

Recordemos que cinco personas fueron arrestadas a mediados de este mes por su relación con el caso. Perry fue encontrado sin vida en el jacuzzi del patio trasero de su casa en Pacific Palisades en 2023.

Con la próxima declaración de culpabilidad de Chavez, se reconocerá su responsabilidad en el fallecimiento del famoso por tercera vez.

Un segundo médico, Salvador Plasencia, trabajaba con Chavez para obtener la ketamina, que luego era suministrada a Kenneth Iwamasa, asistente de toda la vida de Perry, quien se encargaba de inyectar la droga al actor.

Se indica que, desde septiembre de 2023 hasta el fallecimiento de la estrella de "Friends", los tres distribuyeron alrededor de 20 viales de ketamina a Perry, por un valor de 55 mil dólares.

Cuando se anunciaron las acusaciones y los arrestos, las autoridades mencionaron que Chavez también había hecho declaraciones falsas a un distribuidor mayorista de ketamina y había utilizado recetas falsas a nombre de un expaciente.

La oficina del Médico Forense del Condado de Los Ángeles señaló que una alta dosis del fármaco provocó que el actor sufriera sobreestimulación cardiovascular y depresión respiratoria. La cantidad de ketamina encontrada en su sangre era aproximadamente la misma que se utilizaría durante la anestesia general. Además, su muerte se vio influenciada por ahogamiento, enfermedad de la arteria coronaria y los efectos de la buprenorfina, utilizada para tratar el consumo de opioides.

Tras declararse culpable, podría ser sentenciado hasta 10 años de prisión.

Perry fue encontrado muerto por su asistente el 28 de octubre. El médico forense dictó que la ketamina fue la causa principal de la muerte. El actor había usado la droga a través de su médico habitual en un tratamiento legal pero no indicado para la depresión, un uso que se ha vuelto cada vez más común.