Anthony Hopkins es el actor más longevo en ser nominado a un Oscar. El veterano actor, de 83 años, lucha por hacerse con su segundo galardón después de alzarse con la estatuilla en 1991 por su brillante papel de Hannibal Lecter, uno de los asesinos más peligrosos de Estados Unidos, en El silencio de los corderos. Ahora, el intérprete de origen galés cambia de rol por completo en El padre, dirigida por Florian Zeller, y se pone en la piel de un anciano mordaz y algo travieso que sufre demencia y rechaza todos y cada uno de los cuidadores que su hija (Oliva Colman) intenta contratar para que le ayuden en casa.
Nada más leer el guión Hopkins supo que estaba ante el papel más interesante de toda su carrera. "Era era el mejor personaje que podía haber soñado nunca", confiesa. Un hombre en su senectud, entrañable y muy vulnerable, que hace que el propio espectador llegue a adentrarse en la mente del enfermo y experimente su confusión, su enfado, sus miedos. El protagonista de Los dos papas se metió tan de lleno en su papel que a veces en los descansos del rodaje se ponía frente a un espejo y se repetía una y otra vez: "Esto es solo un juego ¿vale? No sufro demencia, estoy actuando, estoy actuando". Hay que tener cuidado con el mensaje que trasladas a tu subconsciente porque se lo puede creer", admite. "Yo le recuerdo cosas a mi cerebro, cuando me dice que me falla la memoria o que me estoy haciendo mayor, le digo que no, que sigo siendo joven y fuerte, y el cerebro se lo cree, de verdad que funciona. Hopkins, a sus 83 años, dice que para mantenerse activo toca el piano, pinta o memoriza poemas de Dylan Thomas.
Este papel le ha valido a Hopkins su sexta nominación al Oscar. El aclamado ganador del Bafta compite en la categoría de mejor actor con Riz Ahmed, actor de Sound of Metal, Gary Olman, por Mank, Steven Yeun, de Minari y Chadwick Boseman, el fallecido intérprete nominado por su papel en La madre del blues. Oldman también ganó un Oscar por La hora más oscura, mientras que el resto de candidatos son todos aspirantes por primera vez al Oscar. De alzarse con el premio se convertiría en el actor más veterano en levantar la estatuilla dorada y le arrebataría el récord a Henry Fonda por llevarse la estatuilla a mejor actor a los 76 años por En el estanque dorado. También superaría a Jessica Tandy, que obtuvo el Oscar a la mejor actriz con 80 años por Paseando a Miss Daisy, así como a Christopher Plummer, ganador de la estatuilla al mejor actor de reparto con 82 años por su papel en Beginners.
El Padre ha obtenido en total seis nominaciones. La actriz británica Olivia Colman, quien interpreta el papel de su hija celebró la nominación, aunque ya sabe lo que es ganar la estatuilla tras venecer en 2019 con primera nominación por su papel en La Favorita. La cinta también compite en la categoría de mejor película, mejor guión adaptado, mejor montaje y mejor diseño de producción. Es la segunda película después de Mank, que obtuvo 10, con más nominaciones de la 93ª edición de los Oscar.