CIUDAD DE MÉXICO, septiembre 18 (EL UNIVERSAL).- Además de pedir disculpas por su comportamiento y asegurar que iniciará un tratamiento psicológico que lo ayude a salir adelante, el actor Ezra Miller estaría tomado otro tipo de acciones con tal de garantizar su papel en "The Flash", cinta que DC Comis y Warner han estado preparando y en la que estaba contemplado el actor.
De acuerdo con la revista "Vanity Fair", la situación legal de Miller ha empezado a calmarse y los problemas que enfrentaba como agresión, robo, entre otros, han desaparecido; sin embargo, esto no se debe a que el actor haya sido encontrado inocente, sino a que él mismo y su equipo legal le estarían pagando fuertes sumas de dinero a sus presuntas víctimas con el fin de que retiren los cargos en su contra.
En un extenso reportaje que publicó la revista, señalan que tuvieron acceso a un acuerdo de confidencialidad entre el actor y uno de sus demandantes; además de que pudieron hablar con tres fuentes, no identificadas, quienes hablaron de una estrategia denominada "Whack A Mole", en la que todo se estaría arreglando fuera de los tribunales.
"Vanity Fair" señala que no pudo conseguir una declaración oficial de Ezra o de las personas que accedieron a desistir de sus denuncias; sin embargo, le advirtieron al medio que "no agitara el nido de avispas".
¿Ezra Miller planeaba crear su propia secta?
En la investigación, la revista también destaca que la mayoría de los problemas de Miller derivan de un complejo de Mesías que sufre el actor, incluso, señalan que él mismo se autonombraba una especie de Dios o de demonio, dependiendo del contexto.
De ahí que el joven tratara a sus fans como si estuvieran en una especie de secta cuya residencia oficial era el rancho en Vermont, propiedad de Ezra, donde además de tener un altar para que las mujeres hicieran tributos, también tenía regadas múltiples armas de fuego y sustancias como la marihuana.