CIUDAD DE MÉXICO, abril 16 (EL UNIVERSAL).- Luego de que se diera a conocer que antes de que los restos de Julián Figueroa fueran cremados en la funeraria J. García López, personal del tanatorio habría grabado y fotografiado el cuerpo del cantante, en búsqueda de lucrar con las imágenes, se ha sugerido que Maribel Guardia, junto con su esposo Marco Chacón, ya preparan una demanda la cual podría efectuarse bajo el argumento de daño moral.
Además, se presume que la actriz también podría actuar legalmente contra el periodista que difundió un documento de la Fiscalía de la CDMX , siendo el primero en notificar acerca de la muerte del joven de 27 años.
A poco de que se cumpla una semana de la muerte de Julián Figueroa, el hijo de Maribel Guardia y Joan Sebastian, tras padecer un infarto al miocardio y fibrilación ventricular, a las 20:00 horas aproximadamente del pasado domingo 9 de abril, el youtuber Jorge Carbajal ha dado seguimiento a los pormenores que rodean el deceso del joven cantante pues, en principio, se llegó a rumorear que su muerte se debió a un suicidio u homicidio.
Sin embargo, a pocas horas de que la noticia se diera a conocer públicamente dichas especulaciones se atenuaron, debido a que no sólo la madre del también actor publicó las causas de la muerte de Julián, sino que el periodista Carlos Jiménez, especializado en información policiaca, difundió su acta de defunción, en la que se precisa que perdió la vida por causas naturales y, ahora, circula la versión de que Maribel podría proceder legalmente en contra del reportero por compartir esta información antes de que la familia confirmara el deceso.
Además, se asegura que tanto Marco Chacón, esposo de la actriz desde hace 13 años, como Maribel ya están asesorándose legalmente pues supuestamente buscan demandar a la funeraria que estuvo a cargo de incinerar los restos de Julián, ya que se informó que parte del personal del recinto tomó fotografías y grabó el cuerpo del músico antes de que este fuera cremado.
Otra de las versiones de las que se ha hablado es que la responsabilidad recaería no sólo en la o el empleado que tomó las imágenes, sino en la funeraria, pues presuntamente estaba enterada de dicha acción.
Si bien, Maribel y su esposo no han confirmado oficialmente el emprendimiento de una demanda, el abogado de la familia Ocaña, Francisco Hernández, ha expresado que, si la familia toma la decisión de demandar a la funeraria, podría hacerlo a través del argumento de daño moral, debido a la afectación privada que les causaría la difusión de dichas imágenes.
La funeraria J. García López no ha querido pronunciarse públicamente.