CIUDAD DE MÉXICO, octubre 2 (EL UNIVERSAL).- Alfredo Adame emitió nuevas declaraciones respecto a la golpiza que le propinaron y que le partió la cabeza en cinco fracturas y reveló que, además de estar aterrado de que los criminales lo balasen, perdió el 30 por ciento de la vista.
Así lo narró a su salida del Reclusorio Sur de la CDMX, lugar al que asistió a su primera audiencia respecto a su caso por la demanda en contra de sus agresores.
Ahí Adame afirmó que considera que en cualquier momento los criminales que lo agredieron podrían hacerle llover plomo, pues viven a tan solo unos pasos de su casa.
"Yo tengo mucho miedo, no quiero que salgan de la cárcel, porque viven a 300 metros de mi casa a ver a qué hora me tiran un balazo".Alfredo dijo que hasta el momento no es posible determinar si sufre desprendimiento de retina; pero dejó claro que ya nunca verá las cosas como antes: "el 30 por ciento de la visión ya la perdí".