La banda de metal alternativo Slipknot enfrenta una situación legal vinculada a la muerte de su baterista, Joey Jordison, fallecido en 2021 a los 46 años.
La empresa encargada de administrar el legado del músico presentó una demanda alegando que la agrupación capitalizó el trágico suceso de Jordison para su propio beneficio, especialmente al intentar impulsar las ventas de su álbum "The End, So Far", lanzado un año después de su fallecimiento.
El documento legal, obtenido por "TMZ", detalla que miembros clave como Corey Taylor y Michael Shawn Crahan habrían engañado a los seguidores al afirmar que se comunicaron con la familia de Joey para expresar sus condolencias, lo cual sería falso.
Las bajas ventas de "The End, So Far"
En cuanto al álbum "The End, So Far", se revela que no alcanzó el éxito esperado. Según la compañía demandante, Taylor y Crahan, decidieron declarar que las nuevas canciones estaban dedicadas a su difunto colega y que la pérdida de Joey se hizo evidente durante su proceso de escritura.
La disputa entre Jordison y la banda aparentemente comenzó antes, ya que se reveló que lo despidieron mediante un correo electrónico mientras lidiaba con la mielitis transversa aguda, una condición que resultó en la pérdida de una extremidad.
A pesar de un acuerdo aparente para devolver las pertenencias de Joey, la demanda sostiene que esto nunca sucedió. Hasta la fecha, 22 de esos artículos, incluyendo su máscara y unos tenis Adidas, siguen en posesión de Slipknot y forman parte del museo de la banda conocido como Knotfest. Los músicos de "Nero Forte" niegan las acusaciones y presentaron documentos solicitando la desestimación de la demanda.