Si los gritos homofóbicos que se han escuchado por parte de la afición mexicana en los Juegos del Tricolor continúan y siguen haciéndose presentes, la FIFA no se temblará la mano para sancionar de manera severa a la Selección Mexicana de Futbol.
El conjunto mexicano ha recibido varios llamados de atención tras dicho grito homofóbico cuando un arquero despeja un balón, siendo que primeramente fueron advertencias de la FIFA y después esto se trasladó a severas sanciones económicas como el millón de pesos que tuvieron que pagar en esta última ocasión en la Liga de las Naciones de la Concacaf, sus últimos partidos amistosos y el tener que jugar sus primeros dos partidos de su eliminatoria de local sin el apoyo de su gente, aunque si dicho grito se mantiene y se sigue escuchando cuando juegue México dentro de los próximos encuentros amistosos o ya en la Copa Oro, la FIFA no se temblará las manos y podría repetirle a México lo de Italia 90.
La FIFA amenazó hace unos días a la Selección Mexicana sobre el quite de puntos en torneos internacionales si dicho grito homofóbico continuaba en los recintos en los que jugaran sus partidos, aunque la amenaza más grande fue que están avisados a qué pueden perder su acreditación al Mundial de Qatar en 2022 si el comportamiento de la afición mexicana no logra mejorar.
Si los gritos continúan, el quite de puntos y la no participación de México en el próximo Mundial de Qatar en 2022 se harían realidad y con ello replicarían a lo de Italia 90, cita mundialista a la que no pudieron ir tras el tema de los "cachirules".
La FIFA sancionó a México luego de que en un torneo Sub-20 alinearan a futbolistas mayores de dicha edad y es por ello que la Selección Mexicana de Futbol no pudo jugar el Mundial en Italia de 1990, aunque también estuvieron ausentes de todo tipo de participaciones en selecciones juveniles como los Juegos de Seúl en 1988.
Poco más de 30 años más tarde, ahora el Tricolor podría no jugar la Copa Mundial de Qatar en el 2022 si los gritos homofóbicos de su afición continúan en los estadios, aspecto de que ocurrir sería la segunda sanción más severa de la FIFA hacia México tras lo ocurrido en 1990.
Otra selección que fue sancionada por FIFA fue la de Chile en 1994 luego de que el arquero Roberto Rojas fingiera haber sido agredido con una bengala lanzada desde las tribunas del Maracaná y con ello poder ganar los puntos en la mesa y sin jugar, siendo que tras esto se inició una investigación por parte del máximo ente rector del futbol a nivel mundial y se dictaminó que el guardameta se había generado el corte por acción propia y no por una agresión de la afición brasileña, aspecto por el cual fueron sancionados los propios chilenos y no pudieron disputar la eliminatoria de Sudamérica rumbo al Mundial de 1994.
Otra sanción fue la de Yugoslavia para el Mundial de 1994 que tras estar en la Guerra de los Balcanes y luego de ser gobernada por un gobierno federal, la FIFA los excluyó de la cita mundialista de Estados Unidos y otro castigo de este ente rector que replicó para el Mundial de Qatar en 2022 fue para la propia Rusia, esto después de que la Agencia Mundial Antidopaje encontrara a atletas dopados de origen ruso para competencias internacionales y luego de una investigación exhaustiva se concluyó que ese país, en dado caso de clasificarse a la cita mundialista del próximo año, no podrá usar su bandera ni su himno.
Estas fueron las sanciones más severas por parte de la FIFA hacia algunas selecciones nacionales, aunque ninguna de ellas sería parecida a lo que antes ha vivido México y lo que ahora podría ocurrir.