Lo que los demandantes desean son 45 millones de dólares de indemnización, pero además “vamos a exigir que todos los involucrados hasta el mismo Infantino, vaya preso”, dijo Pablo Silva.
En declaraciones al diario As de España, el brasileño apuntó que han sido pacientes, qué antes de que estallara el FIFA Gate habían estado negociando con Sepp Blatter y Humberto Grondona, “pero cuando estalló el escándalo todo se suspendió, mas cuando vimos que se utilizó (el spray) en el Mundial de Rusia (2018) estallamos”.
Se habla de que por cada partido oficial de FIFA en qué se haya utilizado el spray se podrían cobrar alrededor de 18 mil dólares, lo que daría una cifra de más de 150 millones de dólares.