Al menos doce personas murieron este sábado en una estampida de aficionados que acudían al estadio Cuscatlán de San Salvador para ver un encuentro del torneo local de fútbol entre los conjuntos Alianza y FAS, informó la Policía Nacional Civil (PNC).
"El número de fallecidos tras la estampida en el Estadio Cuscatlán asciende a doce", informaron autoridades.
A los fallecidos se suman varios aficionados lesionados "al menos dos de ellos en condición crítica", añadió la policía.
Según la Policía, la estampida en una de las entradas del estadio fue provocada por aficionados que trataron de entrar a ver el partido.
La oficina de prensa de la presidencia de El Salvador declaró que la estampida se debió a la venta de entradas falsas: los aficionados frustrados intentaron entrar por la fuerza en las gradas.
El partido fue suspendido mientras los cuerpos de socorro evacuaban a las personas del escenario, en una operación que involucró a centenares de agentes de Policía y efectivos militares.
El ambiente era de desconcierto en los alrededores del estadio donde predominaba el intenso ulular de las sirenas de ambulancias, constató la Afp.
En medio de la emergencia, el ministro de Salud, Francisco Alabí, aseguró que en la red hospitalaria "están brindando atención médica a todos los pacientes".
El portavoz de la agrupación de socorro Comandos de Salvamento, Carlos Fuentes, declaró que "preliminarmente se manejan más de 500 atenciones" que se concentraron en el sector de "sol popular" del estadio, con capacidad para unas 35 mil personas, ubicado en el sector suroeste de San Salvador.
Las cien personas en mayor estado de gravedad fueron trasladas a hospitales nacionales y del Instituto Salvadoreño del Seguro Social, algunos presentaban signos de asfixia y otros "diferentes tipos de traumatismos".
En cuanto a cómo se inicio el incidente, Fuentes dijo que "al parecer cayó uno de los portones del sector de sol y eso hizo que la gente se aglomerara".