PACHUCA, Hgo.- Juego de ajedrez disfrazado de futbol fue el que se vivió entre Pachuca y Cruz Azul. Terminaron tablas en la primera partida (0-0), dejando todo para el Estadio Azteca. ¿Le convino a La Máquina? Quizá, salió sin daño de visita, pero no hizo gol. ¿Le convino a los Tuzos? Puede ser, porque aunque no ganaron en casa, ahora pueden marcar en la Ciudad de México y complicar al líder.
Lo que es verdad es que, aunque el duelo fue muy estratégico, quedó a deber, ya que esta Liguilla había acostumbrado a otro tipo de juegos. La realidad es que el empate fue justo. Si hubo alguno que pudo irse con ventaja fueron los Tuzos, pero esto no es de merecer.
Tras un primer tiempo parejo, Pachuca adelantó líneas al iniciar la segunda parte. El juego comenzó a abrirse un poco, lo que aprovechó Juan Reynoso para hacer los primeros movimientos, en claro mensaje de ir por un gol. Paulo Pezzolano quiso ganar el juego con base en centros y metió a Mauro Quiroga, aunque sacó a sus alas: Felipe Pardo y Romario Ibarra, pero fue cuando más peligro generaron los Tuzos.
Óscar Ustari no había tenido trabajo en la segunda parte, hasta que hubo un rebote de su defensa Gustavo Cabral, y reaccionó para evitar el gol. Después, Santiago Giménez se quedó cerca del gol, pero un rebote cayó en Orbelín Pineda, quien falló.