La Selección Mexicana Sub-23 terminó en un discreto sexto lugar del torneo Maurice Revello, al caer por 1-3 ante el equipo Sub-19 de Japón.
El sitio que consigue el equipo dirigido por Ricardo Cadena es decepcionante, sobre todo porque los rivales, en su mayoría, eran equipos menores, Sub-19.
El saldo de la Selección Mexicana al final de este tradicional torneo es de 1 victorias, dos empates (con un punto extra al ganar la tanda de penaltis) y dos derrotas.
Aunque México dominó el inicio del juego, fueron los nipones los que acabaron poniendo condiciones con el tanto de Soma, máximo goleador del torneo (21').
El Tricolor no dejó de tener el balón la mayor parte del tiempo, pero sin llegar a la portería rival.
Apenas hubo un remate de Ettson Ayón al final de la primera parte, que fue rechazado por el portero, que más tarde se convertiría en la figura del juego.
En la segunda parte, un error en la salida del jugador del León, el volante Fidel Ambriz provocaría el segundo tanto japonés, esta vez de Kento Shiogai (55´).
Por ganas no quedó, México fue por un gol que los metiera al partido pero el portero Araki se convirtió en una verdadera muralla, que sólo pudo romper el delantero del Mazatlán FC, Ramiro Arciga (84') al rematar dentro del área chica una pelota que quedó suelta.
Se esperaba que a partir de ese momento, el cuadro mexicano fuera por todo por el empate, a pesar del poco tiempo que quedaba en el reloj, pero su ímpetu hizo que se descuidara en la parte defensiva y Hisatsugu Ishii acabó con las esperanzas con el tercero de los asiáticos en tiempo de compensación (97').
Así el cuadro Tricolor quedó en sexto lugar, lo que no deja un buen sabor de boca.