GUADALAJARA, Jal., noviembre 27 (EL UNIVERSAL).- Como un hacedor de sueños, un constructor de instituciones culturales, un hombre completo, plural y multifacético, fabricante del mundo de la cultura, arquitecto del destino de la FIL y de otros destinos, un hombre múltiple que hubiera gustado vivir 120 años, definieron a Raúl Padilla López, el fundador de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, que ayer recibió un homenaje en el que cientos de personas celebraron al universitario, al gestor cultural y al amigo, y despidieron con un largo aplauso de pie, con el "Himno a la alegría" como fondo musical, y con la distribución, no venal, de un libro sobre su vida, titulado "El hombre que amaba los libros".
"Sabemos que Jalisco ha sido un surtidor cultural de México y que lo fue particularmente en el siglo XX, porque Jalisco dio a México y al mundo pintores, arquitectos, escritores, poetas, artistas, pensadores, historiadores, mexicanos dedicados a las humanidades y a las artes con proyección nacional y universal, a ese extraordinario elenco hay que agregar, sin duda alguna, la figura de Raúl Padilla. No era un escritor, no era un escritor, no era un arquitecto, no era poeta ni un pintor, pero tenía el genio que vincula a todas las artes y las humanidades", afirmó el historiador Enrique Krauze a través de un mensaje grabado.
Recibió un homenaje en el que cientos de personas celebraron al universitario, al gestor cultural y al amigo
Rinden homenaje a Raúl Padilla López, fundador de FIL de Guadalajara
Recibió un homenaje en el que cientos de personas celebraron al universitario, al gestor cultural y al amigo