Uno de los rituales o costumbres más conocidas para recibir al año nuevo son las tradicionales uvas, donde la media noche del 31 de diciembre al escuchar el sonido de las campanas que marcan la llegada de Año Nuevo, muchos mexicanos comienzan a comer 12 uvas.
Con cada una de estas 12 uvas las personas piden un deseo o piensan en los propósitos por alcanzar en 2023.
El origen de esta tradición tiene varias teorías, que se remontan al siglo XIX en España.
Con el pasó de los años, esta costumbre llegó con la Conquista de manera oral a suelo mexicano, así como a diversos países de habla hispana como Venezuela, Argentina, Ecuador, Perú, Chile y Colombia.
Según la tradición, en la mesa se colocan 12 uvas delante de cada comensal que simbolizan los 12 meses del año y deben comerse con cada una de las campanadas del reloj.
Además, se cree que aquellos que se terminen las 12 uvas en los primeros 60 segundos del Año Nuevo tendrán buena suerte durante los siguientes 365 días.