Representa joven a la UANL en la Olimpiada Internacional de Biología

Desde pequeño, Sergio tenía un notable interés por la ciencia

La pasión de Sergio Alejandro Cruz, estudiante de la Universidad Autónoma de Nuevo León por la biología lo llevó a formar parte de la delegación mexicana que participará en la Olimpiada Internacional de Biología en Kazajistán.

Desde pequeño, Sergio tenía un notable interés por la ciencia, y aunque aún no lo tenía claro, la curiosidad por descubrir su entorno lo llevó a observar los insectos y conocer las plantas cuando era niño.

En la secundaria, el joven descubrió a detalle la materia de biología, pero al llegar a la preparatoria se rodeó de profesores que lo adentraron al estudio de la vida. Hoy, a sus 17 años, Sergio Alejandro Cruz representará a la Universidad Autónoma de Nuevo León en la Olimpiada Internacional de Biología.

"Desde la primaria recuerdo haber sido una persona muy curiosa e interesada en todo mi entorno. No le pude dar mucho énfasis hasta la preparatoria, que tenía biología por todos los semestres, y ahí fue cuando empecé a desarrollar un interés más notable en la ciencia", recordó el universitario recientemente egresado del Centro de Investigación y Desarrollo en Educación Bilingüe de la UANL.

"Un amigo me hizo saber que estaba la competencia estatal (de biología) y decidí participar, dar mi mayor esfuerzo y ver qué pasaba, y ya cuando quedé de los seleccionados para la olimpiada nacional, fue cuando decidí si quería seguir llevando esto a un tono serio", explicó.

Con sede en Kazajistán, la trigésima quinta edición de la Olimpiada Internacional de Biología se realizará del 7 al 14 de julio. En este encuentro participarán estudiantes de 80 países. A México lo representan cuatro estudiantes, uno de ellos Sergio, quien buscará poner en alto el nombre de la Universidad Autónoma de Nuevo León.

"Significa un reto para ver de lo que soy capaz y también poder representar a todas las personas que me apoyaron. Esta es una forma de desafiarme", aseguró el estudiante, aceptado en la Facultad de Medicina de la Máxima Casa de Estudios del Estado.

"Esta competencia internacional me tiene un poco nervioso porque voy a estar contra todo, o sea, es una competencia contra todos y, bueno, también estoy un poco emocionada al respecto", agregó.

En palabras de Sergio, el nivel de la olimpiada representa un reto que trasciende cualquier conocimiento adquirido en la preparatoria, incluso, aún mayor que el aprendizaje adquirido por los estudiantes de la carrera de biología.

Sesiones de preparación con el apoyo del maestro Manuel Torres, de la Facultad de Ciencias Biológicas de la UANL, le permitieron clasificar a nivel estatal y nacional, para posicionarse como uno de los mejores cuatro del país.

En Kazajistán, Sergio deberá poner a prueba todos los conocimientos adquiridos en biología celular y molecular, anatomía y fisiología vegetal y animal, genética, evolución, ecología, biosistemática y etología.

"Es un temario muy largo, por lo que es muy complejo tener un dominio completo de toda la biología. Yo lo que disfruto más es el tema de genética, ya que incluye probabilidades matemáticas que a mí se me facilitan, y temas como ecología, biología animal y molecular también son interesantes.

"La competencia consiste en cuatro pruebas prácticas a lo largo de un día y el siguiente día es un examen teórico que dura tres horas. Y, bueno, en el práctico puede venir cualquier tema y nos ponen a hacer distintas pruebas", explicó.

Aunque confiesa que no será sencillo, el universitario promete dar lo mejor para volver a casa con una medalla, para orgullo de México y la UANL con dedicatoria para sus padres, maestros y amigos, quienes lo han apoyado en todo este camino.