El Arzobispo de Monterrey, Rogelio Cabrera López, encabezó las celebraciones de la Jornada Mundial de la Vida Consagrada.
Las celebraciones comenzaron con una peregrinación con integrantes de la vida consagrada, la cual partió de la parroquia del Sagrado Corazón del Centro de Monterrey, teniendo como punto de encuentro la Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe, donde se llevó a cabo la Santa Misa.
El Arzobispo de Monterrey, agradeció a los laicos por su apoyo a todos los consagrados.
“Agradezco a mis hermanos y hermanas, fieles laicos su cariño y su oración, ni los consagrados y consagrada, ni los sacerdotes y los obispos, podemos seguir adelante nuestro camino sin su oración, sin su cariño, por eso hoy agradezco a ustedes y a todos los fieles que siempre nos apoyan en nuestro caminar”, mencionó Cabrera López.
Asimismo, invitó a no tener miedo a la crisis vocacional que se vive en la actualidad.
“No tengamos miedo a esta crisis vocacional, todos estamos a la baja, hay menos mujeres consagradas, hay menos sacerdotes, pero no tengamos miedo, porque la Iglesia también es estacional, como la naturaleza tiene primavera, verano, otoño e invierno y así se equilibra... ..También la Iglesia sabe de este ciclo, a veces primavera, a veces invierno, el invierno también le hace bien a la naturaleza, purifica, fortalece y prepara la primavera, probablemente estamos en un invierno vocacional, es tiempo de purificación, es tiempo de penitencia y así podemos vivir con esperanza este momento”, puntualizó.
En tanto, señaló que uno tiende fácilmente a entrar en la comodidad, a pensar que todo es éxito y triunfo
"El Señor le ha dado a su Iglesia esta misión, de vivir en la contrariedad, de vivir en el desprecio y en las dificultades, ninguno de los que estamos aquí, ni ustedes las consagradas, ni nosotros los sacerdotes aceptamos el llamado del Señor para triunfar, para triunfar hay otros foros, este no, el Señor nos llamó a dar la vida y con amor, sabiendo que nuestra perdida es una ganancia”, añadió.
Por último, resaltó que hoy en día las redes sociales crean un mundo de fantasía, de ser influencers, de que nos aplaudan, por lo que pidió dejarlo a otras personas.