CIUDAD DE MÉXICO, noviembre 11 (EL UNIVERSAL).- La disgeusia, un término que cobró mayor relevancia durante la pandemia de COVID-19, es una alteración del sentido del gusto que puede tener un impacto en varias áreas de la vida de quienes la padecen. Afecta la percepción de los sabores, lo cual no solo altera la alimentación, sino que, obviamente, también puede tener consecuencias emocionales y psicológicas.
De acuerdo con Clínica Dental Ferrus & Bratos, la disgeusia es una distorsión en la percepción del sabor. Esta alteración puede manifestarse de diferentes formas, como sabores metálicos, amargos, ácidos o simplemente una reducción en la capacidad para saborear los alimentos. Puede ser un efecto secundario de varias condiciones, incluyendo tratamientos oncológicos, medicamentos polifarmacéuticos, envejecimiento, complicaciones de diabetes, enfermedades neurológicas, y más recientemente, secuelas de COVID-19.
¿Cómo afecta la disgeusia en el día a día?
El impacto de esta condición va más allá de la mera pérdida del gusto. Físicamente, puede llevar a la pérdida de apetito y, por ende, a desnutrición y fragilidad en el paciente. En el aspecto emocional, puede causar frustración, ansiedad, tristeza e incluso depresión, debido a la disminución del disfrute de las comidas y la experiencia social asociada a ellas.
En respuesta a este problema, Cantabria Labs Nutrición Médica desarrolló un complemento alimenticio diseñado específicamente para tratar los trastornos del gusto. Contiene miraculina, una glicoproteína que se adhiere a los receptores de la boca, transformando los sabores desagradables en más aceptables. Este ingrediente activo, extraído de la pulpa de una baya tropical africana, fue aprobado como "novel food" por la EFSA (Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria).
El principio activo de TasteCare, el DMB, actúa directamente en las papilas gustativas, transformando los sabores metálicos, ácidos, amargos o salados típicos de la disgeusia, sin alterar el sabor original de los alimentos. Esto facilita la ingesta de alimentos, ayuda a cumplir con los requerimientos nutricionales y favorece el mantenimiento de los hábitos alimenticios en su contexto psicosocial.
Su uso es sencillo: se chupa un comprimido lentamente antes de las comidas. Una vez disuelto, se espera unos minutos para que alcance su máxima eficacia. Este suplemento proporciona una experiencia sensorial única que ayuda a los pacientes a recuperar el placer por la comida y procesar el sabor de lo que comen.