Ciudad de México.- Nuevos elementos que rodean al Monumento 9 de Chalcatzingo, mejor conocido como el "Portal del Inframundo" o "Monstruo de la Tierra" fueron publicados el 2 de junio pasado en el suplemento cultural "El Tlacuache", por los arqueólogos encargados del estudio de la importante pieza arqueológica, Mario Córdova Tello y Carolina Tello Rodríguez.
El artículo cuenta la importancia de la pieza histórica, la posible forma en que fue robada y las gestiones a cargo de autoridades mexicanas y estadounidenses por rastrearla y regresarla a México. "Es así que hacemos una breve síntesis historiográfica de la repatriación del Monumento 9 de Chalcatzingo. Esta historia tuvo un comienzo y varias vicisitudes durante el camino", se puede leer en el artículo.
El texto explica que fueron varios los personajes involucrados en la salida de la pieza al extranjero, pero que no todos son nombrados. También señala que a mediados del siglo XX México no contaba con una ley de protección de patrimonio, hecho que propició el saqueo desmedido y la venta de patrimonio en todo el terreno mexicano.
"Circunstancia reinante y complementada por el interés naciente sobre las culturas antiguas de México, puesto en los ojos de investigadores, coleccionistas y saqueadores quienes estaban ávidos de conocer más sobre el pasado indígena de México, a través de sus magníficas reliquias u objetos que los acompañaron durante ceremonias, rituales y aún en su vida cotidiana", explican los arqueólogos.
Los especialistas explican que fue un campesino quien halló la pieza en primer lugar en la Zona Arqueológica de Chalcatzingo en algún momento de finales de la década de los cincuentas. "Así transcurre el maravilloso hallazgo entre el silencio del agricultor que lo encontró y la suspicacia y viveza de quien se lo llevó".
El texto explica que aún se desconoce a la o las personas que se encargaron de robar la pieza y la forma en que llegó a Estados Unidos. "Un saqueador del cual desconocemos el nombre, que seguramente a estas alturas ya trascendió a otro plano y que propició ese vacío que dolía y cada vez era más evidente, cuando se trataba de leer e interpretar las escenas ceremoniales talladas en la roca", explican los especialistas.
También se aborda que desde 2005 hubo una serie de comunicaciones con especialistas que estuvieron rastreando el documento, y fue en 2008 que se encontró en Estados Unidos, a manos de un coleccionista privado.
"Para tener argumentos convincentes y contundentes transcurrieron otros 15 años, (vaya que somos lentos, pero seguros), y fue en abril de 2022 que se retoma el tema por parte de la SRE a través de su consultor jurídico Alejandro Celorio Alcántara, gracias a la insistencia anual del arqueólogo Córdova por el tema de la repatriación del Monumento 9 y la importancia de que regresase a su lugar de origen".