Las dos etapas de mayor felicidad, según la ciencia

Los investigadores analizaron cómo la satisfacción con la vida varía según la edad.

CIUDAD DE MÉXICO, septiembre 2 (EL UNIVERSAL).- Según un estudio reciente de la Universidad de Nueva Gales del Sur, en Australia, existen dos etapas clave en la vida en las que las personas experimentan los mayores niveles de felicidad: entre los 15 y los 22 años, y nuevamente entre los 65 y los 80 años.
Los investigadores analizaron cómo la satisfacción con la vida varía según la edad, basándose en una encuesta que preguntaba a los participantes cuándo y por qué se sentían más felices. Los resultados, presentados por Ioana Ramia en la Conferencia de Política Social de Australia, ofrecen una nueva perspectiva sobre cómo la felicidad evoluciona a lo largo de nuestras vidas.

El Auge de la Felicidad en la Juventud

El primer período de felicidad máxima, según el estudio, se sitúa entre los 15 y los 22 años. Durante estos años, las personas suelen experimentar su primer amor, forjar amistades profundas, y enfrentarse al mundo con optimismo y esperanza. La combinación de libertad, vida social activa y la promesa de un futuro lleno de posibilidades contribuye significativamente a los sentimientos de satisfacción personal.
Sin embargo, esta felicidad tiende a disminuir al entrar en la adultez, cuando aparecen las responsabilidades laborales, financieras y las tensiones matrimoniales. Estos desafíos de la vida adulta, combinados con la presión de cumplir con expectativas sociales, pueden llevar a una reducción notable en los niveles de felicidad.

El estudio también señala que la felicidad vuelve a surgir entre los 65 y los 80 años.

En esta etapa, muchas personas se encuentran en la jubilación, lejos de las presiones laborales, y pueden disfrutar de más tiempo libre para actividades personales y familiares.
Aunque los problemas de salud son más frecuentes en esta etapa, la reducción de las responsabilidades diarias y un enfoque en el bienestar personal pueden incrementar la satisfacción con la vida. La investigación indica que, al alcanzar los 80 años, las personas tienden a aceptar las limitaciones de la vida con una actitud más relajada y agradecida.

El estudio sugiere que la satisfacción con la vida es dinámica y cambia en función de las experiencias y las etapas de la vida.

Además, otro estudio de la Universidad de Yale complementa estos hallazgos al destacar cómo las edades intermedias, como los 40 y 50 años, también pueden ser significativas, con algunos experimentando una "depresión" temporal relacionado con la pérdida de seres queridos o el síndrome del nido vacío.

A pesar de estas fluctuaciones, el consenso general entre los participantes es que las relaciones amorosas y las conexiones emocionales juegan un papel crucial en la percepción de la felicidad a cualquier edad.