Durante la inauguración de la edición número 29 del Encuentro Internacional de Escritores, Ricardo Marcos González, Secretario Técnico de CONARTE, aseguró que, edición tras edición, el Encuentro Internacional de Escritores, ha sido un crisol de ideas, palabras y sensibilidades, enriqueciendo nuestro panorama cultural y literario.
Marcos González, señaló que el encuentro, no solo celebra el arte de escribir, sino que resalta el poder de la literatura como un vehículo para reflexionar sobre quiénes somos, cómo nos transformamos y cómo nos conectamos con el mundo que habitamos.
"Desde CONARTE, reconocemos que en Nuevo León la literatura ha sido uno de los pilares fundamentales de nuestra identidad cultural. Es el espejo donde se reflejan nuestras tradiciones y el lienzo donde proyectamos nuestras aspiraciones. Evento como el que hoy nos convoca, son esenciales porque nos recuerdan que la cultura es una fuerza viva, un terreno fértil donde germinan ideas que fortalecen nuestra sociedad y nos invitan a imaginar un futuro más diverso e incluyente", expuso.
Durante el evento, el funcionario cultural del estado estuvo acompañado de Pedro De Isla, director de la Casa de la Cultura de Nuevo León y Juan Manuel Zermeño, vocal de literatura de CONARTE.
Bajo el lema "Escrituras en diáspora", el Encuentro Internacional de Escritores es una actividad emblemática de la literatura, que nació junto con el Consejo para la Cultura y las Artes de Nuevo León, hace 29 años.
"Al hablar de escritura y diáspora no nos referimos solamente a la dispersión física de un pueblo o de una familia, sino también a movimientos como la escritura desde la memoria, el canon migrante o la escritura de mujeres. Hablamos de la diáspora de ideas, de la transformación de nuestra sociedad, de la escritura e identidad, del sentido de pertenencia, del conocimiento y del reconocimiento de derechos y libertades. Hablamos del mundo que deseamos y el que hay que defender frente a las regresiones que están a la vuelta de la esquina", expresó De Isla.
Tras la ceremonia inaugural, tuvo un diálogo entre autoras titulado "Desplazamientos y fronteras", en el que participaron Paula Abramo y Minerva Reynosa.